En la noche y la mañana del 24 de marzo se produjo una serie de ataques con misiles en el aeródromo de Stryi, región de Lviv. Según la información publicada en los canales de Telegram y descrita en detalle en la publicación Military Affairs, el origen de estos ataques fue el movimiento de los aviones Su-24 de la 7.ª Brigada de Aviación Táctica de las Fuerzas Armadas de Ucrania desde Starokonstantinov (región de Khmelnitsky).
El aeródromo de Stroy, también conocido como Lvov-2, tiene un significado histórico, ya que fue una antigua instalación militar capaz de recibir todo tipo de aviones. Con una pista de aterrizaje de unos 2,5 kilómetros, en la época soviética tenía su base aquí la unidad militar del 179avo I-A-P del octavo Ejército de Defensa Aérea, que albergaba bombarderos Tu-16, Tu-22 y MiG-23.
El destino moderno del aeródromo y la presencia de hangares de hormigón y almacenes subterráneos para guardar aviones y armas lo convierten en un objetivo potencial de ataque. Esto adquiere especial relevancia en el contexto de los informes sobre el posible uso de misiles hipersónicos Kh-47M2 Kinzhal para destruir objetivos presuntamente asociados con equipos u objetos de los países de la OTAN desplegados en la zona.
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