En la zona conocida como Campos Flégreos, cerca de la ciudad italiana de Nápoles, existe un volcán cuya actividad los vulcanólogos poseen muchas y variadas evidencias.
En las áreas colindantes a estos campos, famosos por sus afloramientos hidrotermales, se ha registrado el aumento de la temperatura del suelo y las deformaciones de la superficie. Hace millones de años las erupciones de los supervolcanes cambiaron por completo la faz de la Tierra. Hoy los científicos ni siguiera se atreven a pronosticar las consecuencias del posible despertar de uno de ellos.
Ultimamente los Campos Flégreos van elevándose sobre el nivel del mar tres centímentros al mes. Una serie de pequeños terremotos y la acumulación de los gases en el suelo indican que el volcán empieza a mostrar primeros signos de inquietud y actividad sísmica. El investigador de la Facultad de Geología de la Universidad de San Petersburgo, Vladímir Kiriánov, explica:
—La elevación estable de la superficie puede significar que bajo la tierra se está inflando un “globo de magma” gigante. El volcán de losCampos Flégreos es un supervolcán, un tipo de volcán que produce las mayores y más voluminosas erupciones de la Tierra expulsando al menos mil kilómetros cúbicos de magma y material piroclástico. Se sabe que en el supervolcán de Yellowstone, explosiones anteriores lanzaron rocas de tamaño considerable que podría llegar desde América hasta Europa. El de los Campos Flégreos entró en erupción hace unos treinta mil años. Los restos de su ceniza volcánica aún se encuentran en el Mediterráneo, en Ucrania e incluso en Rusia. Ahora se está produciendo la acumulación del magma, lo cual puede significar que el supervolcán se está despertando.
Una erupción del supervolcán arrasaría la vida en un radio de cientos de kilómetros, e incluso sepultaría bajo una capa de cenizas algunas regiones continentales bastante alejadas e incluso sumir a la Tierra en un invierno volcánico, expulsando ácido sulfúrico a la atmósfera. Esto sucedió en nuestro planeta, hace entre setenta y setenta y cinco mil años, cuando un supervolcán situado en el lago Toba, en Indonesia, entró en erupción originando la denominada Edad de Hielo milenaria, y erradicando cerca del 60% de la población humana de la época, tal como afirma la teoría de la catástrofe de Toba.
Aunque las erupciones de los supervolcanes son tan poco frecuentes que los científicos no disponen de los datos precisos sobre el proceso. Es imposible predecir cuánto tiempo deberá pasar desde que se registraron las primeras señales sísmicas hasta que el supervolcán entre en errupción. Comenta el vulcanólogo de la Academia de las Ciencias de Rusia Alexéi Sobisevich:
—La acumulacvión de la magma no es un dato que permita pronosticar la entrada en errupción. Pueden pasar decenas y cientos de años hasta que suceda el cataclismo. Muchas montañas en la Tierra se elevan hasta cinco centímentros al año. Es un proceso natural.
Según el experto, un fenómeno mucho más importante se está produciendo en la Península rusa de Kamchatka, donde tras cuarenta años de inactividad se despertó recientemente el volcán Tolbachik. En general, los científicos advierten que todo el sistema volcánico de la Tierra está acumulando tensiones. Cualquier consecuencia de este proceso afectará la vida de los habitantes del planeta.
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