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domingo, 13 de marzo de 2016

EL CANTANTE DE “EAGLES OF DEATH METAL”, INSINÚA QUE LOS GUARDIAS DE LA SALA BATACLAN CONOCÍAN CON ANTELACIÓN EL ATAQUE TERRORISTA

Jessie Hughes, el cantante de Eagles of Death Metal, la banda de rock que estaba tocando durante los atentados contra la sala Bataclan de París del pasado noviembre, en el que murieron 89 personas, realizó extrañas y polémicas insinuaciones durante una entrevista con Fox Business Network, en las que insinuó que los guardias de seguridad en la sala Bataclan quizás conocían de antemano los ataques terroristas en París.



Hughes afirmó durante la entrevista de que se dio cuenta de que algo raro ocurría esa noche, antes del ataque, cuando el guardia de seguridad de la zona de detrás del escenario no le vio.

“Cuando llegué por primera vez al lugar y entré, pasé al lado del tipo que se suponía que era el guardia de seguridad para el backstage”, recordó Hughes, observando el comportamiento extraño del guardia.

“Fui de inmediato al promotor y le dije: ‘¿Quién es ese tipo? Quiero meter a otro tipo ahí’ y él me respondió ‘Bueno, algunos de los otros guardias ya se han ido’ y, finalmente, descubrí que seis guardias de seguridad ya no estarían en la sala”



Aunque Hughes se negó a especular “por respeto a las investigaciones de la policía”, añadió, “Parece bastante obvio que tenían alguna razón para no aparecer”



Tras la gravedad de las insinuaciones y ante el aluvión de críticas recibidas, Hugues se ha visto obligado a pedir perdón públicamente por insinuar que los guardias del Bataclán en París fueron cómplices del ataque que se llevó en noviembre.

Sus palabras provocaron negativas reacciones en Francia y especialmente por parte del personal del recinto contra el músico, al punto de que debió retractarse de su error.



“Humildemente ruego perdón al pueblo de Francia, al personal y a la autoridad del Bataclán, a mis admiradores, familia, amigos, y quien sea que yo haya lastimado u ofendido por las absurdas acusaciones que hice”, declaró el criticado artista, percatándose de la magnitud de sus palabras emitidas en el informe.

“Mis insinuaciones de que cualquiera afiliado al Bataclán tuvo una participación en los acontecimientos del 13 de noviembre son infundadas y asumo plena responsabilidad por ellas”, agregó en sus declaraciones.



“He tenido pesadillas interminables así como dificultades durante la terapia para entender esta tragedia y locura. No he sido yo mismo desde el 13 de noviembre (…) Estoy consciente de que no hay excusa para mis palabras, pero por si les sirve de algo: lamento sinceramente haber lastimado, faltado el respeto o acusado a alguien”, confesó.

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