Trump habla de nuevos misiles inteligentes; Putin habla de derribarlos a todos y de hundir a todos los buques de guerra estadounidenses
En respuesta a estas amenazas estadounidenses ha salido a decir la cancillería rusa que cualquier ataque contra su aliado sirio o contra las fuerzas rusas desplegadas en aquel país será contestado de manera contundente, de tal manera que todos lo misiles que sean lanzados contra ellos serán derribados en el acto; y así mismo, serán destruidos todos los sitios o naves desde donde sean lanzados.
Estas declaraciones no pueden ser más claras: por un lado EE.UU. amenaza a Rusia con una respuesta militar “aplastante” como castigo por su presunta participación en el ataque químico; pero por el otro lado tenemos a Rusia declarando que cualquier ataque será anulado en el acto y que los responsables serán eliminados en el mismo lugar desde donde se realizase la agresión.
En otras palabras; Rusia está diciendo que destruirá todos los buques, aeropuertos, aeronaves y bases militares desde donde sean lanzados los misiles y bombas, ya sea contra ellos o contra sus aliados.
Esta situación no puede ser más delicada, pues en caso de concretarse la amenaza estadounidense contra Rusia o siria, eso sería el preludio de una conflagración atómica global. Pues rápidamente se pasaría de utilizar solo armas convencionales a utilizar armas tácticas o estratégicas atómicas.
Tal parece que a Trump y a sus compatriotas les ardió sumamente la presentación que hizo Vladimir Putin de las nuevas armas rusas; pues intentan anular la amenaza que supondrían esas armas para su seguridad nacional antes de que sean completamente desplegadas en todas las ramas del ejercito ruso. Claro que solo representan una amenaza, si, y solo si, EE.UU. Intentase una agresión contra Rusia, si no, no representarían ningún peligro para ellos.
Pero como ya sabemos que EE.UU. se siente el gendarme y el dueño del mundo, no quiere que nadie más disponga de un arma que sea capaz de detener sus aspiraciones imperialistas y expoliadoras de naciones soberanas.
Es por eso por lo que buscan la confrontación con Rusia antes de que les sea imposible intentar un golpe militar exitoso y sin consecuencias graves para ellos.
De esta manera es que tenemos a un Donald Trump amenazando con atacar a Rusia y a sus aliados para castigarlos por un supuesto ataque químico en siria. Pero como podemos ver las verdaderas razones son mucho más profundas que eso; en esta acción se juega el futuro mismo de los EEUU, así como del mundo entero, pues una confrontación militar entre ambas potencias nos afectaría a todos los demás.
Pero después de su diatriba contra Putin y contra Rusia, parece que Donal Trump se ha dado cuenta de lo grave del asunto y ha salido a decir, en forma de pregunta para Putin: ¿detenemos la carrera armamentista o la continuamos?
Eso después de que minutos antes escribiera un tuit en el que Advertía a Rusia de que se preparara para el inminente ataque con misiles, aclarando que ahora solo se utilizarían nuevos misiles “inteligentes”; eso en clara alusión al estrepitoso fracaso anterior cuando se lanzaron 59 misiles Tomahawk contra siria, misiles que fueron derribados o anulados en su totalidad por Rusia.
Claramente Trump está hablando de nuevas armas, armas de las cuales no se ha revelado ningún detalle hasta ahora, y parece ser que Trump está seguro de su eficacia contra las defensas rusas y contra sus armas de lucha electrónica.
Eso quiere decir que actualmente los célebres misiles Tomahawk han sido dados de baja del servicio activo dentro del ejército de los EE.UU., pues después de lo de siria está claro que son totalmente ineficaces a la hora de enfrentarse contra las nuevas armas de Rusia y china.
De esta manera tenemos que Trump esta amenazado a Rusia con “nuevas” armas, armas hasta ahora desconocidas para el resto de los mortales; pero si fueran tan buenas como Trump cree, no lo diría de esa manera, hablando de misiles “inteligentes”, pues por más “inteligentes” que sean (supongo más que Trump) no serán eficaces contra las armas rusas, pues ningún sistema electrónico actual, o equipo de software, es inmune a las armas de lucha radioelectrónica que actualmente posee Rusia. Así que no importa lo inteligentes que sean los nuevos misiles estadounidense, pues a final de cuentas siguen siendo circuitos electrónicos, circuitos que igualmente pueden ser freídos, como sucedió en el pasado, por las armas rusas. Es más, ni siquiera son hipersónicos, mucho menos de vuelo ilimitado, como si lo son los nuevos misiles rusos.
Así que la cosa estaría como cuando Trump le dijo a Kim Jong Un: mi botón es más grande que el tuyo. Ahora Putin le dirá a Trump: mi misil es más grande que el tuyo.
No hay punto de comparación entre los nuevos misiles estadounidenses contra los nuevos misiles rusos, pues además de ser también “inteligentes”, los misiles rusos son también hipersónicos y de vuelo ilimitado.
Así que no hay tal carrera armamentista como dijera Trump, pues nada tienen que hacer las nuevas ramas estadounidenses contra las nuevas armas rusas; es solo un intento más de Trump por calmar al oso ruso, pues teme se exaspere y ataque; cosa que sin duda desgarraría al mismo Trump y a todo su país.
Esa es toda la verdad de lo que actualmente está pasando entre rusos y estadounidenses; y es también toda la realidad con respecto a lo que ha estado vociferando Trump, pues solo habla a lo tonto sin conocer realmente las verdaderas capacidades del ejército estadounidense, y mucho menos las verdaderas capacidades del nuevo ejército ruso. No tiene más que preguntarles a sus generales que pasó con los Tomahawk, o a sus marines que pasó con el destructor Donald Cook; destructor que por cierto ha sido enviado nuevamente a la zona de conflicto, es decir, a aguas cercanas a las costas sirias.
Ahora no solo va a ser anulado el dichoso buque, sino que además va a ser hundido junto a todos sus compañeros.
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