Un destacado comandante del Cuerpo de Guardianes de Irán tacha de “ilegal” cualquier presencia de Israel en el Golfo Pérsico y dice que podría desatar una guerra.
“Una eventual presencia del régimen sionista (israelí) en las aguas del Golfo Pérsico es ilegal, ya que puede acarrear una guerra y confrontación militar en la región”, advirtió el comandante de la Fuerza Naval del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI), el contralmirante Ali Reza Tangsiri.
En una entrevista concedida el domingo a la cadena libanesa Al-Mayadeen, el alto mando militar persa cargó contra Estados Unidos y el Reino Unido por intentar crear una fuerza marítima “ilegal” en el Golfo Pérsico y llamó a ambos países a asumir su responsabilidad sobre las posibles consecuencias de una presencia israelí en la zona.
El pasado martes, y según los medios israelíes, el ministro israelí para asuntos exteriores, Yisrael Katz, comentó la posibilidad de incorporarse a la coalición con Washington y Londres para desplegarse en el Golfo Pérsico. La Casa Blanca afirma que esta fuerza marítima busca proteger la libre navegación en estas aguas, pero que, según varios expertos, en realidad tiene como meta hacer frente a Irán.
El vocero de la Cancillería iraní, Seyed Abás Musavi, advirtió a su vez que una posible presencia de Israel en las sensibles aguas del Golfo Pérsico constituye una amenaza clara para Teherán, y que la República Islámica “se reserva el derecho de contrarrestarla”.
La idea de formar una coalición antiraní en la región surgió después de una serie de ataques sospechosos a varios petroleros a mediados de junio en el mar de Omán. Estados Unidos, Israel y sus aliados en el Golfo Pérsico acusaron, sin prueba alguna, a Irán de los sabotajes, pero Teherán rechazó categóricamente esta aseveración.
Una eventual presencia del régimen sionista (israelí) en las aguas del Golfo Pérsico es ilegal, ya que puede acarrear una guerra y confrontación militar en la región”, advirtió el comandante de la Fuerza Naval del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI), el contralmirante Ali Reza Tangsiri.
“Estados Unidos ataca a petroleros cerca de aguas iraníes para luego culpar a Irán de ello”, denunció Tangsiri, y advirtió que Washington y Londres intentan legitimar así su presencia en el Golfo Pérsico.
El comandante de la Armada del CGRI dijo que la República Islámica es responsable de garantizar la seguridad del estrecho de Ormuz y el Golfo Pérsico, y aseguró que los países de la zona no necesitan “la presencia de los extranjeros”.
Subrayó que el mundo y los países regionales deben saber que Irán garantizará la seguridad del estrecho de Ormuz siempre y cuando se permita exportar su petróleo a través de esta vía fluvial.
“Irán es el abanderado de la seguridad en el Golfo Pérsico, pero eso depende de la exportación de nuestro petróleo. Garantizaremos la seguridad de la zona mientras nuestra seguridad esté garantizada”, apostilló Tangsiri en una advertencia indirecta a EE.UU. que intenta detener la venta del crudo iraní en el marco de su política de “presión máxima” contra Teherán.
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