Fuentes militares estadounidenses de alto rango revelaron este Lunes, 08 de diciembre, que los ataques aéreos de Israel cerca de Damasco, el día antes, destruyó hardware ruso recién llegado incluyendo misiles que fueron enviados en posta para ayudar a Siria y Hezbollah a frustrar un plan de Estados Unidos para una prohibición de vuelos en una zona en el norte de Siria.
Las armas avanzadas se enviaron en la forma comoDebkafile informó exclusivamente este domingo, después que el presidente ruso, Vladimir Putin, se enteró de que el gobierno de Obama y el gobierno de Erdogan estaban cerca de un proyecto final en un esfuerzo conjunto para activar una zona de exclusión aérea que prohibiría el tráfico aéreo sirio y forzaría el tráfico en el norte de Siria.
El Kremlin ha advertido en repetidas ocasiones – en los últimos tiempos en mensajes fuertes a través de canales traseros – que el establecimiento de una prohibición de vuelos o zona de amortiguamiento en cualquier parte de Siria sería tratado como una intervención directa de Estados Unidos en la guerra de Siria y daría lugar a la intervención militar de Rusia para la defensa del régimen de Assad.
De acuerdo con el proyecto de Estados Unidos y Turquía, a los aviones de guerra estadounidenses se le permitiría despegar de la base aérea turca de Incirlik, en el sur para llevar a cabo operaciones contra los aviones de combate, helicópteros de asalto de Siria o zánganos que entren en la zona de exclusión. Hasta el momento, Ankara ha permitido sólo US aviones de vigilancia y aviones teledirigidos del uso de Incirlik para el seguimiento de los movimientos de los terroristas del Estado islámico en el norte de Siria.
La administración Obama fue largamente disuadido de implementar un plan de zona de exclusión aérea por el deseo de evitar irritar a Moscú o frente a los peligros del sistema de defensa aérea de clase mundial de Siria.
Pero Washington ganó recientemente sobre el plan por un acuerdo tácito con Damasco para que a los jets estadounidenses se les permita la entrada para ayudar a los combatientes kurdos que defienden su enclave sirio septentrional de Kobani contra la posible captura por parte de terroristas de Al Qaeda y el ES.
Sin embargo, el gobierno de Estados Unidos rechazó una demanda turca de ampliar la zona de exclusión aérea en su frontera en cuanto a Alepo, la ciudad más grande de Siria, sobre el cual las fuerzas del ejército sirio están luchando contra los rebeldes y avanzando poco a poco en la ciudad.
La zona de exclusión aérea planificada por los estrategas sería estrecha – entre un kilómetro y medio de profundidad dentro de Siria. Sin embargo Moscú está de pie en contra de tal plan y se opone a que los aviones estadounidenses vuelen con libertad en el espacio aéreo sirio, una libertad de la que ahora gozan de más en Kobani.
Para entender este punto, los rusos entregaron un suministro de misiles antiaéreos avanzados y radar, cuyo uso por parte del ejército sirio y la transferencia a Hezbolá en el Líbano fueron frustrados por los ataques aéreos israelíes el Domingo.
Moscú reaccionó rápidamente y furiosamente con una nota al Lunes ante las Naciones Unidas acusando a Israel de “acción agresiva” y exigiendo “que tales ataques no deben volver a ocurrir … Moscú está profundamente preocupado por esta situación peligrosa, circunstancias de las cuales exigen una explicación.”
El régimen de Assad se ha abstenido de reaccionar a los últimos ataques aéreos israelíes en prevención de que armamento avanzado llegue a Hezbollah. Esta vez, los portavoces en Damasco advirtieron que la respuesta de su gobierno sería clandestina y que Israel recibiría un “daño inimaginable”.
Fuente: Debkafile
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