A primera hora del viernes, el Ejército Árabe Sirio (EAS) capturó la fábrica de cemento de Badia y la base de Khan Abut Shamat (marcados en rojo en el mapa) después de una breve escaramuza contra el ISIS al este de Damasco.
Entretanto, los rebeldes de Jaysh al-Islam (ejército islámico) mantuvieron fuertes enfrentamientos con el Estado Islámico dentro de la población de Dumayr. En estos momentos, el control del pueblo está dividido entre ambos grupos, aunque la ruta que utiliza el ISIS para recibir suministros y refuerzos está totalmente cortada.
Es la primera vez en cinco años que los rebeldes y las tropas gubernamentales cooperan contra un enemigo mayor, el Estado Islámico. Damasco, además, ha sido testigo de un largo alto el fuego entre ambas facciones.
Como muestra de buenas intenciones, el Ejército Árabe Sirio ha permitido recientemente que un convoy de Jaish al-Islam abandone el este de Goutha para así reforzar a los combatientes que se encuentran dentro de la ciudad de Dumayr. Además, los comandantes de Jaish al-Islam y la Brigada de los Mártires de Ahmad al-Abdo del Ejército Libre Sirio (ELS), han intercambiado sus números de teléfono con comandantes del EAS para que estos puedanproveer a los rebeldes de cobertura aérea en el caso de ser necesaria durante los enfrentamientos con el ISIS.
Mientras, las tropas de la 120 y 81 Brigadas de la segunda División del Ejército Árabe Sirio, apoyadas por las Fuerzas de Defensa Nacional, están avanzando poco a poco hacia el este en la ruta hacia la base aérea de Sayqal, la cual se encuentra cercada por militantes del Estado Islámico.
Tanto los rebeldes como los soldados gubernamentales, intentan hacer retroceder al ISIS hacia los desiertos del este de Siria. No obstante, es muy poco probable que el ISIS se rinda con facilidad, y es que es una zona clave para conseguir avanzar hasta la capital del país.
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