"En el transcurso de acciones ofensivas activas, los destacamentos de asalto del grupo Sur han liberado hoy, [25 de diciembre], completamente la localidad de Márinka, al suroeste de [la ciudad de] Donetsk", anunció Shoigú.
Según compartió Shoigú, el 25 de diciembre la ciudad fue liberada por las unidades del grupo de fuerzas ruso Sur. A lo largo de los últimos años, las fuerzas armadas de Ucrania convirtieron a Márinka en una verdadera fortificación con pasajes subterráneos y defensas contra ataques aéreos y de artillería.
Precisó que cada una de más de 3.000 viviendas en Márinka era un punto extremadamente fortificado, por eso su toma reduce las capacidades defensivas de las fuerzas armadas de Ucrania y mejora las de Rusia.
Por su parte, el presidente de Rusia, Vladímir Putin, felicitó a Shoigú por la liberación de la ciudad y pidió que se transmitan sus más sinceras felicitaciones y palabras de agradecimiento a todos los que han contribuido a este acontecimiento.
"Lo felicito, es un éxito. Transmita mis palabras de agradecimiento a todos los combatientes que participaron en las batallas", declaró el presidente y comandante en jefe de las fuerzas armadas rusas.
Añadió que los militares merecen condecoraciones de Estado y encargó al ministro de Defensa de Rusia que presente propuestas. "Ya sé que los soldados rusos pelearon dignamente y merecen condecoraciones estatales. Le pido que haga una lista de los combatientes sobresalientes", precisó Putin.
De acuerdo con sus palabras, al romper esta zona fortificada, las fuerzas armadas de Rusia han obtenido la oportunidad de avanzar más. Además, destacó que con la toma de Márinka las tropas rusas alejan a las unidades de combate ucranianas de Donetsk.
Rusia lanzó la operación militar especial en Ucrania en respuesta a la solicitud de las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, previamente reconocidas por Moscú como Estados soberanos, para que se les preste ayuda frente al genocidio por parte de Kiev.
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