El presidente de EEUU, Donald Trump, afirmó este sábado durante una conferencia de prensa que "está estudiando" la posibilidad de prohibir en el territorio de su país la actividad de Alibaba, la empresa china dedicada al comercio electrónico en Internet.
En respuesta a la pregunta de una periodista de si planea prohibir las actividades de otras compañías chinas en EEUU, incluida Alibaba, el inquilino de la Casa Blanca respondió: "Estamos considerando otras [opciones], sí".
Con esta declaración el mandatario continúa su 'vendetta' contra las compañías del gigante asiático. Anteriormente Trump ya apuntó contra la plataforma de videos cortos TikTok, propiedad de ByteDance, y el servicio de mensajería WeChat, de Tencent.
Las represalias de la Administración Trump contra firmas chinas obligan a los actores globales a elegir entre Pekín y Washington. "Estamos en un cambio de paradigma y la geopolítica está atravesando una transformación histórica en este momento", señaló a CNN el investigador de la Fundación Hinrich, Alex Capri.
Según Capri, los funcionarios de Washington están haciendo "más acusaciones" contra las empresas tecnológicas chinas, una "indicación de que la Administración realmente está buscando desacoplar" a la industria tecnológica.
Al mismo tiempo, a diferencia de ByteDance o Tencent, Alibaba no ha tenido mucho éxito en su expansión a los mercados occidentales. No obstante, el hecho de que sea un campeón nacional de tecnología en China puede ser motivo suficiente para que Washington lo ponga en la mira, opina el especialista.
En respuesta a la pregunta de una periodista de si planea prohibir las actividades de otras compañías chinas en EEUU, incluida Alibaba, el inquilino de la Casa Blanca respondió: "Estamos considerando otras [opciones], sí".
Con esta declaración el mandatario continúa su 'vendetta' contra las compañías del gigante asiático. Anteriormente Trump ya apuntó contra la plataforma de videos cortos TikTok, propiedad de ByteDance, y el servicio de mensajería WeChat, de Tencent.
Las represalias de la Administración Trump contra firmas chinas obligan a los actores globales a elegir entre Pekín y Washington. "Estamos en un cambio de paradigma y la geopolítica está atravesando una transformación histórica en este momento", señaló a CNN el investigador de la Fundación Hinrich, Alex Capri.
Según Capri, los funcionarios de Washington están haciendo "más acusaciones" contra las empresas tecnológicas chinas, una "indicación de que la Administración realmente está buscando desacoplar" a la industria tecnológica.
Al mismo tiempo, a diferencia de ByteDance o Tencent, Alibaba no ha tenido mucho éxito en su expansión a los mercados occidentales. No obstante, el hecho de que sea un campeón nacional de tecnología en China puede ser motivo suficiente para que Washington lo ponga en la mira, opina el especialista.
Represalias contra TikTok y WeChat
Este viernes, Trump ordenó a la empresa china ByteDance que desinvierta sus intereses en las operaciones de la plataforma de videos cortos TikTok en EE.UU. en un plazo de 90 días.
Previamente, el presidente firmó una orden ejecutiva sobre "cómo abordar la amenaza planteada por TikTok" y ofreció un plazo de 45 días para que las compañías estadounidenses pongan fin a sus operaciones con esta 'app' y con el servicio de mensajería WeChat, dos de las aplicaciones más populares del gigante asiático.
La Administración Trump impuso como fecha límite el próximo 15 de septiembre, cuando las plataformas que, según el presidente, amenazan a la seguridad nacional de EE.UU. serán prohibidas en el territorio del país norteamericano a no ser que las adquiera una compañía estadounidense.
El pasado viernes, el portavoz del Ministerio de Exteriores chino, Wang Wengbin, acusó a Washington de "superponer intereses egoístas por encima de los principios del mercado y de la normativa internacional". "EEUU, con el pretexto de la seguridad nacional, abusa con frecuencia del poder nacional y reprime sin razón a empresas de otros países", señaló el vocero.
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