China advierte a EE.UU. que se olvide de adoptar medidas desde una posición superior y de presumir que tiene la última palabra en los asuntos globales.
“China no aceptará que haya una nación en el mundo que se crea con el derecho de poder tomar medidas en posición de superioridad sobre las demás, y que se crea que tiene la última palabra en los asuntos internacionales. Si EE.UU. continúa en este camino de confrontación, China se lo tomará con calma para encararle sin miramientos”, advirtió el lunes el canciller chino, Wang Yi, según recoge el diario local South China Morning Post.
El jefe de la Diplomacia china, que estaba ofreciendo una rueda de prensa para poner al tanto de los asuntos tratados en su última reunión mantenida con sus homólogos de los demás Estados miembros de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN, por sus siglas en inglés) — a saber, Singapur, Malasia, Indonesia, Filipinas y Corea del Sur—, subrayó que Pekín rechazaba cualquier lista de demandas unilaterales que Washington pudiera poner sobre la mesa en unas conversaciones entre ambas naciones.
“La puerta para el diálogo con China está abierta. Pero el diálogo debe hacerse en igualdad de condiciones y con respeto mutuo”, precisó Wang tal y como indicó el medio chino.
De acuerdo al South China Morning Post, el titular de Asuntos Exteriores del gigante asiático dijo que, si bien la cooperación entre China y Estados Unidos era posible, ambas partes, no obstante, deben respetar cualquier tema que suscite cierta preocupación a la parte contraria.
Desde Pekín se rechaza cualquier injerencia en los asuntos internos del país por parte de Washington, expuso el alto diplomático a los periodistas, para luego agregarles que China se opone drásticamente a las sanciones unilaterales ilegales de EE.UU. impuestas en su contra “en base a un conjunto de argumentos falsos e infundados”.
“China no puede olvidar, [sus principios] so pretexto de que hay muchos países pequeños en desarrollo que nos están apoyando. Empero, China está en su derecho de responder porque debemos defender nuestra soberanía y dignidad nacional”, manifestó.
La escalada de tensiones ha ido acrecentándose entre Estados Unidos y China a medida que la Casa Blanca ha ido cuestionando temas que incluyen el comercio, la ciberseguridad, la tecnología, la nueva ley de seguridad nacional de Hong Kong y las disputas territoriales en el mar de la China Meridional.
Las relaciones entre ambas superpotencias se han deteriorado aún más desde que la pandemia se ha ido extendiendo por todo el mundo, dejando en evidencia el mal manejo del Gobierno estadounidense para luchar contra esta enfermedad en comparación con su homólogo chino.
Dado el cambio producido en la Administración estadounidense en enero de 2021, una representación de alto nivel del equipo del actual presidente Joe Biden se reunió el 19 de marzo en Anchorage (Alaska) con una delegación de China para apaciguar las tensiones entre los dos países.
Sin embargo, en la cumbre quedó en evidencia que la política de Biden frente a China no iba a ser muy diferente a la promovida en su día por su antecesor, Donald Trump, quien consideraba necesaria la creación de una coalición para encarar al gigante asiático.
Pekín, por su parte, ha venido indicando, desde entonces, al nuevo inquilino de la Casa Blanca que no inicie una nueva era de guerra fría, que podría llevar a una confrontación de consecuencias impredecibles.
No hay comentarios:
Publicar un comentario