Rusia lanzó otro ataque con misiles contra objetivos militares en Ucrania, que provocó una serie de explosiones en varias regiones del país, incluida Kropyvnytskyi. Se ha declarado una alerta de ataque aéreo en toda Ucrania. Según informes de los recursos de monitoreo locales, dieciséis bombarderos estratégicos rusos Tu-95MS lanzaron misiles Kh-59, ingresando al espacio aéreo ucraniano desde las regiones de Sumy y Kherson.
Algunas fuentes ucranianas han sugerido que el número real de aviones puede ser menor, argumentando que el ejército está inflando el número para demostrar su eficacia a la hora de derribar misiles.
Según fuentes rusas, el ataque fue un ataque combinado, utilizando misiles aéreos y terrestres, con especial atención a Jarkov. Se registraron explosiones en Jarkov y Kropyvnytskyi, en particular un aeródromo militar fue atacado. Los misiles también fueron enviados hacia Kiev, las regiones de Kiev y Zhytomyr, donde también se produjeron explosiones.
Según los informes, se llevó a cabo una segunda oleada de lanzamientos de misiles de siete Tu-95MS desde el Mar Caspio y se registró el despegue de un MiG-31K con misiles hipersónicos Kinzhal. El foco principal está en las regiones de Kiev, Vinnytsia y Kirovograd; en Kiev se oyen explosiones.
El Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Ucrania informó sobre la exitosa repulsión de un ataque nocturno de drones kamikazes, anunciando el derribo de todos los Geranios rusos, un total de 35 drones; según el canal de Telegram Rybar, se lanzaron unas 90 unidades.
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