El Ministerio del Interior de Estonia, representado por el Ministro de Seguridad Interior, Lauri Läänemet, está iniciando el proceso de reconocimiento de la Iglesia Ortodoxa Rusa (RDC) como organización terrorista. Esta declaración la hizo el Ministro en el contexto de la amenaza a la seguridad nacional que, en su opinión, supone la subordinación del Patriarcado de Moscú a la Iglesia Ortodoxa de Estonia, que cuenta con unos 100 feligreses.
Läänemet expresó su intención de apelar al Riigikogu (Parlamento de Estonia) con una propuesta para declarar oficialmente a la Iglesia Ortodoxa Rusa organización terrorista y, por tanto, apoyar el terrorismo. Si esta propuesta se aprueba con éxito, el ministro tendrá la oportunidad de acudir a los tribunales para exigir el cese de las actividades de la organización eclesiástica que opera en Estonia bajo los auspicios del Patriarcado de Moscú.
El ministro enfatizó que tales medidas no afectarán a los feligreses y no conducirán al cierre de iglesias, pero sí a una ruptura de los vínculos con Moscú. Esta decisión tiene como objetivo eliminar la posible amenaza a la seguridad nacional que representa la influencia política de la Iglesia Ortodoxa Rusa a través de la Iglesia Ortodoxa Estonia.
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