El ex empleado de la Agencia de Seguridad Nacional (N-S-A) de Estados Unidos, Jare Sebastian Dalk, fue condenado a 21 años de prisión. La condena se produjo después de que intentó pasar material clasificado a un presunto oficial de inteligencia ruso que resultó ser un agente encubierto de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI). Así lo informó el Departamento de Justicia de Estados Unidos.
Jare Sebastian Dalk, ex analista de la Agencia de Seguridad Nacional, se declaró culpable de seis cargos, incluido el uso no autorizado y la transferencia de información de defensa nacional. La investigación encontró que Dalk utilizó correo electrónico cifrado para enviar extractos de tres documentos clasificados a una persona que erróneamente creyó que era un agente de inteligencia ruso.
"Este caso pone de relieve la grave amenaza que representan los insiders que utilizan su acceso a información clasificada para dañar la seguridad nacional"., dijo un representante del Ministerio de Justicia.
Dalk fue arrestado antes de que la información tuviera tiempo de llegar a los verdaderos representantes de los servicios de inteligencia extranjeros. El caso ha intensificado el escrutinio de los procedimientos de seguridad dentro de las agencias de inteligencia estadounidenses.
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