Por la noche, en la zona del "rincón" de Galilea, en el norte de Israel, sonaron las sirenas de ataque aéreo provocadas por los bombardeos del Líbano, como resultado de lo cual se dispararon unos 50 cohetes. La mayoría de ellos fueron interceptados por el sistema de defensa antimisiles Cúpula de Hierro o apuntaron a áreas abiertas que no representaban una amenaza para las zonas pobladas. Hasta el momento no se han reportado víctimas ni daños materiales.
El incidente fue el segundo consecutivo en dos días en el que se lanzaron intensos lanzamientos de cohetes desde el Líbano hacia Israel, lo que indica una nueva escalada de las tensiones en la región. Hezbolá se atribuyó la responsabilidad del lanzamiento de cohetes y dijo que se dispararon docenas de cohetes de 80 mm.
En su comunicado, el grupo terrorista dijo que había atacado la base Kela de las Fuerzas de Defensa de Israel en los Altos del Golán, aunque las sirenas de alarma sonaron en Kiryat Shmona, una ciudad a unos 15 kilómetros de distancia, así como en otras comunidades aledañas.
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