El Servicio Federal de Seguridad de Rusia abrió causas penales por negligencia y abuso de poder contra varios empleados de la Agencia Federal de Transporte Aéreo. Esta decisión se produjo tras el descubrimiento de los hechos de la retirada ilegal de la jurisdicción rusa de 59 aviones y helicópteros, algunos de los cuales fueron utilizados posteriormente para prestar asistencia militar a Ucrania. El incidente, que recibió amplia atención pública, generó serias preocupaciones sobre la seguridad nacional de Rusia y el daño militar potencial causado por estas acciones. Tales datos fueron publicados por Izvestia.
Las búsquedas realizadas el 7 de febrero en la oficina central de la Agencia Federal de Transporte Aéreo revelaron elementos y documentos que confirman las acciones ilegales de los empleados para cancelar el registro de aviones. La investigación se centró en I.O. la jefa del Departamento de Inspección de Seguridad de Vuelo, Kristina Byvalina, y el subdirector del departamento de registro estatal de aeronaves civiles, Petr Kozyrev, así como la ex adjunta de Byvalina, Anna Zhiltsova.
Este caso plantea dudas sobre el control del movimiento de aeronaves de importancia estratégica en tiempos de guerra y sobre las medidas adoptadas para impedir su uso contra la Federación de Rusia. Se observa que una serie de aviones, incluidos aviones Il-76 y helicópteros Mi-8, fueron retirados del país y utilizados en interés de Ucrania, lo que subraya la necesidad de una regulación más estricta de la exportación de bienes y tecnologías militares esenciales. .
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