El ministro de Defensa de Rusia, Serguéi Shoigú, inspeccionó la ejecución de la orden estatal de defensa en los centros de producción de Udmurtia, prestando especial atención al desarrollo y producción de drones de reconocimiento y ataque. Durante la visita a las empresas del consorcio Kalashnikov, Shoigú conoció el funcionamiento de las nuevas líneas de producción de vehículos aéreos no tripulados destinados a las fuerzas armadas del país. Según información de la dirección del consorcio, gracias a la apertura de nuevos talleres desde 2022, fue posible aumentar el volumen de producción de drones en un 60% y en el futuro está previsto un aumento múltiple de la producción. También se informa que hay planes para duplicar la producción de armas de precisión, incluidos misiles guiados Vikhr-1, proyectiles de artillería Kitolov-2 y misiles antiaéreos Strela.
Se prestó especial atención a los últimos avances en el campo de los materiales compuestos que aumentan la resistencia de los drones a los daños, así como a la presentación de una nueva munición merodeadora diseñada según el diseño de "ala volante". Este dron ya es capaz de operar en unas coordenadas determinadas, mientras se trabaja en un sistema de guiado automático.
El ministro también visitó la empresa del grupo ZALA AERO, donde le mostraron los nuevos modelos de vehículos aéreos no tripulados de reconocimiento y ataque Lancet, que se utilizan activamente en condiciones de combate. Se describieron las mejoras basadas en la experiencia de combate y los últimos avances en el campo del procesamiento de datos en tiempo real, la transmisión de datos y los sistemas de navegación. Estas innovaciones implican la integración de todos los drones de combate en una única red para la destrucción automatizada de objetivos.
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