A pesar del alto el fuego vigente, la guerra en Siria "no se va a ninguna parte" y se lleva cada vez a más víctimas diariamente, opina el exmilitar James Stavridis, actualmente decano de la Escuela jurídica y diplomática Fletcher de la Universidad Tufts en EEUU, en un artículo para la revista Foreign Policy.
Con toda la miseria en Siria, provocada por la guerra civil, se hace más y más evidente que "Siria como nación es una ficción", asegura Stavridis. Mientras que el Gobierno no controle grandes trozos de su territorio, la probabilidad de restablecer el país en "una entidad que funciona" parece escasa, según el exmilitar estadounidense.
Las fronteras de Siria son infames por su carácter arbitrario, notó Stavridis. Una parte de las razones del conflicto actual procede de la existencia de varias religiones y etnias en el país —resultado de la división de influencia entre Francia y Reino Unido a inicios del siglo XX—.
La opción de dividir un país tiene sus riesgos y complicaciones y suele ser rechazada por la comunidad internacional. Pero la misma posibilidad debe ser discutida para aliviar el conflicto y avanzar en las negociaciones, dice el exalmirante.
Varios expertos teorizan sobre los diferentes escenarios de la división, según Stavridis. Las regiones alauitas de Damasco y sus alrededores podrían seguir bajo control de Bashar Asad y sus sucesores. El centro del país, destacado por su mayoría suní, podría consolidarse tras la eliminación de Daesh y los movimientos vinculados con Al Qaeda (organizaciones terroristas proscritas en Rusia y en otros países). Finalmente, un enclave kurdo podría aparecer en el este del país.
"Está claro que el método de la división del país puede variar desde la separación completa —semejante al caso de Yugoslavia—, hacia un sistema federativo tipo Bosnia y Herzegovina y hasta elementos de federación como los presentes en Irak", dijo el excomandante supremo.
Sin embargo, es necesario contrarrestar las complicaciones de una posible división, destaca Stavridis. La separación de un país sería "un precedente" para las minorías en diferentes países del mundo, que podrían tachar tal escenario como una amenaza para ellos mismos. Además, siempre es difícil negociar una separación, ya que todas las partes suelen estar insatisfechas por el resultado final. Pero, según el exalmirante, a pesar de todas las desventajas, la división de Siria podría aliviar el conflicto y "separar a los beligerantes".
Las fronteras de Siria son infames por su carácter arbitrario, notó Stavridis. Una parte de las razones del conflicto actual procede de la existencia de varias religiones y etnias en el país —resultado de la división de influencia entre Francia y Reino Unido a inicios del siglo XX—.
La opción de dividir un país tiene sus riesgos y complicaciones y suele ser rechazada por la comunidad internacional. Pero la misma posibilidad debe ser discutida para aliviar el conflicto y avanzar en las negociaciones, dice el exalmirante.
Varios expertos teorizan sobre los diferentes escenarios de la división, según Stavridis. Las regiones alauitas de Damasco y sus alrededores podrían seguir bajo control de Bashar Asad y sus sucesores. El centro del país, destacado por su mayoría suní, podría consolidarse tras la eliminación de Daesh y los movimientos vinculados con Al Qaeda (organizaciones terroristas proscritas en Rusia y en otros países). Finalmente, un enclave kurdo podría aparecer en el este del país.
"Está claro que el método de la división del país puede variar desde la separación completa —semejante al caso de Yugoslavia—, hacia un sistema federativo tipo Bosnia y Herzegovina y hasta elementos de federación como los presentes en Irak", dijo el excomandante supremo.
Sin embargo, es necesario contrarrestar las complicaciones de una posible división, destaca Stavridis. La separación de un país sería "un precedente" para las minorías en diferentes países del mundo, que podrían tachar tal escenario como una amenaza para ellos mismos. Además, siempre es difícil negociar una separación, ya que todas las partes suelen estar insatisfechas por el resultado final. Pero, según el exalmirante, a pesar de todas las desventajas, la división de Siria podría aliviar el conflicto y "separar a los beligerantes".
"Desafortunadamente, una división inmediata otorgaría una gran parte de Siria a los extremistas suníes, por lo cual Bashar Asad —apoyado por Rusia— estaría en contra de esta medida", opina el exmilitar.
Mientras esté vigente el alto el fuego es algo prematuro discutir la división de Siria, sin embargo, esta opción,mencionada ya por el secretario de Estado de EEUU, John Kerry, podría promover las negociaciones y dotar las partes de "ideas frescas para considerar en caso un fracaso de la vía actual", concluye el excomandante supremo de la OTAN.
Lea más en http://mundo.sputniknews.com/orientemedio/20160314/1057620810/excomandante-supremo-otan-dividir-siria.html#ixzz42xPLagTK
Mientras esté vigente el alto el fuego es algo prematuro discutir la división de Siria, sin embargo, esta opción,mencionada ya por el secretario de Estado de EEUU, John Kerry, podría promover las negociaciones y dotar las partes de "ideas frescas para considerar en caso un fracaso de la vía actual", concluye el excomandante supremo de la OTAN.
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