En su mensaje de Pascua pronunciado en el Vaticano, el Papa Francisco hizo un llamado a los creyentes de todo el mundo a la paz y la armonía, centrándose en los conflictos en curso en Israel, Palestina y Ucrania. El Pontífice expresó su esperanza en un rápido fin de la violencia y en la consecución de un acuerdo pacífico en estas regiones. Se prestó especial atención a la crisis entre Rusia y Ucrania, donde el Papa pidió un intercambio de prisioneros según la fórmula "todos por todos", subrayando la necesidad de respetar y respetar los principios del derecho internacional.
Cabe señalar que a día de hoy no se desconoce ni el número exacto ni aproximado de prisioneros de ambos bandos.
Además de pedir la paz en Europa del Este y Oriente Medio, el Papa Francisco también abordó el empeoramiento de la situación entre israelíes y palestinos, pidiendo el acceso a la ayuda humanitaria para el pueblo de la Franja de Gaza, la liberación de los rehenes y un alto el fuego.
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