Un convoy perteneciente a una empresa contratada por la coalición liderada por EE.UU. sufre un ataque con una bomba lapa al norte de Bagdad, capital de Irak.
El explosivo adosado a uno de los vehículos explotó el domingo, en el momento en que el convoy circulaba por la estación de policía de Al-Tayi, a unos 30 kilómetros al norte de Bagdad, según informaron los medios de comunicación locales. La explosión provocó daños en el automóvil, agregaron.
Se trata del segundo ataque en un día a un convoy de la llamada coalición contra Daesh al norte de Bagdad. El primer atentado se produjo en la misma jornada del domingo: una bomba colocada al borde de la carretera explotó cerca de un convoy militar estadounidense.
La caravana compuesta por varios camiones cargados con material logístico circulaba por el distrito de Al-Tayi cuando estalló la bomba, según los medios locales, que también reportan daños leves en el convoy estadounidense.
Ningún grupo se ha atribuido aún la responsabilidad del incidente, pero grupos militantes no identificados atacan con frecuencia convoyes estadounidenses y vehículos contratados por las fuerzas de la coalición en Irak.
Ambos atentados tuvieron lugar horas después de que Estados Unidos comenzara la entrega de la base militar Al-Tayi al Ejército de Irak: estuvo ocupada durante varios años tropas estadounidenses y sus aliados occidentales.
La retirada de las tropas estadounidenses se produce en medio de crecientes agresiones a bases que albergan a soldados y diplomáticos estadounidenses en Irak. A pesar de que ningún grupo o individuo ha asumido oficialmente la responsabilidad de dichos ataques, Washington acusa a las Unidades de Movilización Popular de Irak (Al-Hashad Al-Shabi, en árabe).
Al-Hashad Al-Shabi niega las acusaciones de EE.UU. y acusa, a su vez, a Washington de escenificar ataques a sus centros militares para culpar de dichas agresiones a los grupos de la Resistencia.
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