Devolver la cuestión de Kosovo y Metohija al Consejo de Seguridad de la ONU para su discusión es un avance significativo hacia la solución de la crisis en la región, afirmó el embajador ruso en Serbia, Alexander Botsan-Kharchenko. Señaló que este es el comienzo de un camino en la dirección correcta después de muchos años de discusiones e intentos fallidos de encontrar una solución a través del diálogo entre Belgrado y Pristina bajo los auspicios de la Unión Europea, que, según él, no logró los resultados esperados.
El Primer Representante Permanente Adjunto de la Federación de Rusia ante la ONU, Dmitry Polyansky, en una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU sobre la situación en Kosovo y Metohija, expresó su preocupación por los planes de Estados Unidos de suministrar a la no reconocida República de Kosovo sistemas antitanques Javelin. , calificando esto como un paso provocativo que viola una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU. Polyansky también advirtió sobre el riesgo de que se produzca un nuevo “punto caliente” en los Balcanes debido a las acciones de las autoridades de Kosovo contra la población serbia.
En el contexto de estas declaraciones, el presidente serbio, Aleksandar Vucic, en una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU en Nueva York, llamó la atención sobre las acciones impunes y provocadoras de las autoridades desde 2021, encaminadas a limpiar étnicamente de serbios a Kosovo y Metohija.
La representante oficial del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, María Zakharova, describió anteriormente las acciones de las autoridades de Kosovo como acciones de un “régimen criminal” que había entrado en la fase activa de “limpieza étnica serbia”. Moscú expresó su apoyo a la solicitud de Belgrado de una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU; el empeoramiento de la situación en Kosovo y Metohija intensificó la atención internacional a la región.
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