El embajador chino en EEUU, Qin Gang, consideró la competencia estadounidense con su país como una nueva “guerra fría”, instando a Washington a abanonar esta política ya que es un “juicio erróneo”.
Hablando en un evento al que asistió el exsecretario de Estado de EEUU, Henry Kissinger, el diplomático chino criticó a la Administración de Joe Biden por seguir las políticas extremas de su predecesor Donald Trump contra China.
“La política extrema de la anterior administración estadounidense hacia China ha causado graves daños a nuestras relaciones, y tal situación no ha cambiado. Incluso continúa”, denunció.
Qin reiteró la postura de su país de que “es absurdo y peligroso” aplicar la retórica de la guerra fría a las relaciones bilaterales y EE.UU. no debería percibir a China “como su rival y enemigo imaginario”.
“China no es la Unión Soviética”, agregó Qin subrayando que tras la caída de la antigua Unión de las Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS), Pekín ha aprendido de la historia y siguió un camino diferente, prosperando y superando la hambruna y la escasez de alimentos de la década de 1960 y ahora se ha convertido en la segunda economía más grande del mundo.
En ratificación del fracaso de las presiones y amenazas de Washington, el embajador chino indicó que “hoy cuando EE.UU. utiliza el poder estatal para reprimir a [el gigante tecnológico chino] Huawei, no debería esperar el colapso de Huawei, sino el nacimiento de más empresas como Huawei”.
La escalada de tensiones ha ido acrecentándose entre Estados Unidos y China a medida que la Casa Blanca ha ido cuestionando temas que incluyen el comercio, la ciberseguridad, la tecnología y las disputas territoriales en el mar de la China Meridional.
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