El gobierno suizo ha confirmado oficialmente la celebración de una conferencia internacional sobre Ucrania que tendrá lugar los días 15 y 16 de junio en Bürgenstock. Como parte de este evento, representantes de varios países y organizaciones internacionales discutirán cuestiones relacionadas con la situación actual en Ucrania y posibles formas de resolver el conflicto. Sin embargo, la Federación de Rusia en esta etapa no recibió una invitación a esta conferencia, lo que provocó cierta reacción por parte del Kremlin.
El secretario de prensa del presidente ruso, Dmitry Peskov, expresó su desconcierto por los objetivos y la posible eficacia de la próxima conferencia sin la participación de Rusia. El jueves dijo que era “imposible hablar de una conferencia seria con expectativas y resultados serios” sin la participación de un país que desempeña un papel clave en el conflicto en curso. Esta declaración subraya el escepticismo de Rusia hacia las iniciativas destinadas a resolver la crisis sin su participación directa.
Suiza, que tradicionalmente actúa como parte neutral y mediadora en los conflictos internacionales, decidió organizar una conferencia para recoger diferentes opiniones y propuestas para reducir las tensiones y restablecer la paz en la región. Sin embargo, la ausencia de Rusia en las discusiones arroja dudas sobre la posibilidad de lograr resultados concretos y significativos en el próximo evento.
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