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martes, 21 de septiembre de 2021

Colapso chino para el 23 de septiembre: Un nuevo Lehman Brothers protagonizado por Evergrande sacudirá el planeta

Un nuevo descalabro financiero amenaza al planeta 



Hay un gigante que está herido de muerte, y que, si no sucede nada extraordinario en esta semana, puede caer y arrastrar con él al resto del sistema financiero mundial. 

Así es, y aunque me duela decirlo, en china se está fraguando un posible colapso financiero, colapso que arrastraría a todo el sistema bancario chino y, por inercia, al resto del planeta. 

En china la mayor empresa inmobiliaria, Evergrande, está a punto del impago de la deuda a sus acreedores. Ya los ejecutivos de la empresa han advertido que esta semana puede suceder que incumplan sus obligaciones financieras.  

Ante estas declaraciones los mercados han reaccionado con mucho nerviosismo y las bolsas mundiales han comenzado A Sufrir, destacando sobre todo la de Hong Kong. Las acciones de Evergrande han caído en lo que va del año un 80%, contando el 9% que se han desplomado tan solo en lo que va del presente mes. 

Esto, se entiende, es un colapso en toda regla, aun no del sistema bancario chino e internacional, pero sí de la citada empresa inmobiliaria. Y es que no se trata de poca cosa, pues la empresa china tiene una deuda acumulada de más de 280 mil millones de dólares; deuda que se reparte entre diferentes instituciones bancarias, fondos de capital y acciones. 

De esta manera podemos entender que, si cae Evergrande, con ella se llevará a muchas empresas, fondos de inversión y bancos, pero sobre todo a los más pequeños entre aquellos que tengan deuda invertida en Evergrande. 

Pero esto es como un juego de dominó, si cae uno, caen todos, porque todo el sistema financiero esta interrelacionado entre sí, unos más, otros menos, pero de alguna forma todos se verán perjudicados, sobre todo en china, pero de china se extenderá al resto del mundo; o quizá no, pero eso lo desarrollare a continuación. 

Es algo muy similar a lo que pasó con la crisis financiera del año 2008, año cuando un solo banco de inversión, el Lehman Brothers, un banco que ni siquiera era de los grandes, se llevó entre las patas al resto del sistema bancario estadounidense, y de allí se extendió al resto del Planeta.  Entonces los bancos que sobrevivieron, sobre todos los más grandes, y aquellos que se vieron beneficiados por los rescates del gobierno, procedieron a comprar a los bancos más chicos. Igual con las empresas, las más grandes y fuertes, además de aquellas rescatadas por el gobierno, se comieron a las más chicas. 

Pero lo que es aún más importante, los principales perjudicados con estos desplomes financieros no son los banqueros, ni los empresarios, ni aun los más ricos; en realidad los más perjudicados son la gente común, los de a pie. En el caso de la empresa china Evergrande, los más perjudicados van a ser sus clientes, es decir, todas aquellas personas que contrataron a la empresa para que construyera sus viviendas, o todas aquellas que se endeudaron a través de un crédito hipotecario para poder acceder a una vivienda construida por Evergrande. 

Sin embargo, y pese a todo el panorama gris, es poco probable que el gobierno chino se quede de brazos cruzados y no haga nada por salvar la situación, es decir, por intervenir la empresa y tomar el control de ella, procediendo a una reestructuración de la misma y a la liquidación de los activos necesarios para salir del problema. En tanto, el gobierno chino asumirá las responsabilidades del gigante Evergrande mientras se encuentra un comprador, o varios, para proceder a la venta de la empresa. 

Pero mientras en occidente cuando sucede un caso como estos se procede al rescate de la empresa, y de sus accionistas y, o, dueños, sin obligarles a rendir cuentas ante la justicia y sin despojarles de sus propiedades para pagar la deuda, en china las cosas se harán de manera muy diferente y allí los dueños y accionistas sí pagarán las consecuencias de sus malos manejos y tendrán que resarcir los daños, ya sea vendiendo la misma empresa, o liquidando sus propiedades y congelando sus cuentas bancarias. No como en occidente, donde los empresarios y banqueros corruptos no sufren castigos por sus malas acciones y encima les regalan millones de millones de dólares para salvar sus empresas y para comprar a la competencia. 

En conclusión; si bien en china hay un grave riesgo de sufrir un colapso financiero limitado, también el gobierno chino no es el gobierno estadounidense, o el gobierno de la unión europea, ni el gobierno de ningún país latinoamericano; lugares donde se premia la corrupción y se rescata a los delincuentes; caso mexicano del rescate bancario conocido como FOBAPROA. 

No, china no va a rescatar a sus empresarios corruptos, sino que ellos a los que van a rescatar va a ser a los ciudadanos para que no pierdan su patrimonio; y los empresarios y banqueros que hayan obrado mal, pagarán las consecuencias. 

Por otro lado, no debemos de perder de vista que estamos hablando de la primera potencia económica mundial, país al cual una cifra de 280 mil millones de dólares es como quitarle un pelo a un gato. No olvidemos que tan solo la deuda estadounidense que posee china asciende a la astronómica cifra de 1,6 billones de dólares, esto es, un millón 600 mil millones de dólares; es decir, 5,3 veces lo que debe la empresa Evergrande a sus acreedores en total. 

Asimismo, el producto interno bruto de china el año pasado, en medio de la pandemia, fue de 15 billones de dólares, esto es, 15 millones de millones de dólares, o sea, 50 veces lo que debe Evergrande. Pero a eso debemos de añadir que en lo que va del presente año el producto interno bruto ha crecido un espectacular 19%, con lo que es probable que china termine el año con un producto interno bruto de cuando menos 18 billones de dólares; cantidad más que suficiente para pagar la deuda de Evergrande sin apenas despeinarse.  

Por otra parte, china tiene unas reservas de divisas extranjeras de cuando menos 3,2 billones de dólares. 

Pero quizá el punto a favor de china más fuerte sea la misma fortaleza de su moneda, pues a diferencia de EEUU, país que ha destinado cerca de 10 billones de dólares desde el año 2019 solo para rescatar a su sistema bancario y corporativo, china no ha tenido que desembolsar nada pues su economía es mucho más fuerte y sana que la de EEUU y no ha tenido que rescatar a nadie; si lo hace con Evergrande, será la primera vez que lo haga en mucho tiempo.   

Por esta razón, la deuda creciente de EEUU, es que el dólar no para de caer y cada día se devalúa más frente a las principales divisas del mundo, incluyendo, por supuesto, al Yuan chino. Así que, mientras la deuda de EEUU se hace cada vez más grande, la deuda de China se hace cada vez más pequeña, pues su moneda, el Yuan, cada día se hace más fuerte.   

Esta fortaleza del Yuan es lo que permite a China poder endeudarse si quiere, y no pagará casi intereses por ello, pues inclusive podría darse el caso de que la deuda en vez de crecer, esta disminuya al revalorarse el Yuan frente a las principales monedas del mundo.  Esto le permitiría a China hacer lo que ha hecho EEUU durante décadas, es decir, imprimir yuanes a lo loco y no sufrir ninguna consecuencia por ello, al menos no a corto plazo; pero claramente ese no es el camino de las autoridades chinas y ellas no repetirán los errores de EEUU, país que ha imprimido a lo bestia dólares y más dólares durante muchos años sin pagar las consecuencias; solo que la fiesta ya se les terminó y ahora el mundo cada vez acepta menos dólares, lo que está llevando a la devaluación acelerada de la moneda norteamericana y, por consiguiente, al aumento de su deuda pública; y eso es precisamente lo que tratan de evitar en Pekín.  

Pero como sea, estos problemas con la empresa Evergrande son cosa minuta para Pekín, con lo que podemos estar tranquilos porque creo nada pasará que deba preocuparnos; no obstante, hay que estar prevenidos, no sea que la puerca tuerza el rabo.

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