Promesa cumplida: un destructor británico zarpa rumbo a las Malvinas

El destructor británico HMS Dauntless, uno de los buques de guerra más modernos, equipado con misiles de alta tecnología, zarpó este miércoles rumbo al Atlántico Sur (la región de las islas Malvinas) “para una misión rutinaria de patrullaje” que durará unos seis meses. El hecho se produce dos días después de que Argentina conmemorara el trigésimo aniversario de la guerra contra el Reino Unido, con el que se disputa la soberanía de dichas islas.

El Gobierno británico anunció que enviaría el destructor a las Malvinas a finales de enero de 2012. La noticia incrementó las tensiones entre Argentina y el Reino Unido y volvió a poner de relieve el problema de la soberanía de dichos territorios.

Argentina acusó a Londres ante la ONU de la militarización de la región. A su vez, el primer ministro británico, David Cameron, señaló que defenderá el derecho de los isleños, que tienen ciudadanía británica, a decidir su propio futuro.

Este lunes el ministro de Defensa británico, Philip Hammond, aseguró que pese a los recortes de gastos militares, el Reino Unido tiene suficientes recursos, personal y equipamiento para defender las islas Malvinas si Argentina emprende una invasión.

Las autoridades de Argentina, por su parte, consideran que el envío del HMS Dauntless es una nueva provocación del Gobierno británico que tiene el control de las islas desde el año 1833 y no tiene previsto cederlas a la nación sudamericana.

Después de la guerra de 1982, el archipiélago se considera un territorio de ultramar del Reino Unido, pero varios países apoyan a Argentina en sus reivindicaciones. En los últimos años el hallazgo de importantísimos recursos petrolíferos en la zona de explotación que abarcan las islas centra gran parte de los intereses que provocan esta disputa.

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