China ha firmado un acuerdo para cultivar tres millones de hectáreas (alrededor de 11,583 millas cuadradas) de tierra de Ucrania en el lapso de medio siglo, lo que significa que el país del este de Europa se desprenderá aproximadamente del 5% de su superficie total, es decir el 9% de la tierra cultivable para alimentar a la creciente población de China.
Según el acuerdo entre la Xinjiang Production and Construction Corps, o XPCC y KSG Agro, una empresa agrícola de Ucrania, los cultivos y los cerdos criados en la región oriental de Dnipropetrovsk se venderán a precios preferenciales a dos empresas de propiedad estatal de granos de China. El proyecto se lanzará con 100.000 hectáreas y, finalmente, se ampliará a tres millones. Aquí hay un poco de contexto sobre lo que parece:
El acuerdo se produce después de que Ucrania levantara una ley que prohíbía a los extranjeros comprar tierras de Ucrania el año pasado. Como parte del acuerdo, el Banco de Exportación e Importación de China ha dado a Ucrania un préstamo de 3 mil millones de dólares para el desarrollo agrícola. A cambio de sus productos, Ucrania recibirá semillas, equipos, una planta de fertilizantes (Ucrania importa cerca de mil millones de dólares en fertilizantes cada año), y una planta para producir un agente de protección de cultivos. XPCC también dice que va a ayudar a construir una carretera en la República Autónoma de Crimea de Ucrania, así como un puente sobre el estrecho de Kerch, un centro de transporte e industria para el país.Los críticos dicen que la medida es un ejemplo de una serie de acuerdos globales de tierras que huelen a colonialismo y a extracción de recursos de los países más ricos a los más pobres. Hoy en día, este tipo de acuerdos están motivados cada vez más por los gobiernos que buscan la seguridad alimentaria de sus ciudadanos, en lugar de ganancias para empresas privadas. Arabia Saudita, Corea del Sur, los Emiratos Árabes Unidos, el Reino Unido, los EE.UU. y otros países han estado comprando tierras agrícolas extranjeras, sobre todo después del pico mundial de precios de los alimentos de 2007-2008 que los disturbios globales impulsaron. Según un informe del año pasado de Grain, sin fines de lucro, el objetivo principal de estas adquisiciones ha sido África, pero también Europa del Este, América Latina y Asia. Entre el 0,7% y el 1,75% de las tierras agrícolas del mundo se están transfiriendo de los locales a los inversores extranjeros, dijo otro estudio en enero.
Habida cuenta de su disminución de tierras agrícolas disponibles y la gran expansión de la población, China ha sido uno de los más agresivos. El país consume alrededor de un quinto de los suministros de alimentos del mundo, pero es el hogar de sólo el 9% de las tierras agrícolas del mundo, gracias a la rápida industrialización y urbanización de la nación antes agraria. Su trato con Ucrania es su mayor inversión en tierras hasta ahora. Desde 2007, China ha comprado tierras de cultivo en América del Sur, el sudeste de Asia y África.
Algunos analistas temen que el acuerdo entre Ucrania y China allane el camino para una eventual toma de control chino de todas las tierras cultivables de Ucrania. Temores similares sobre la seguridad alimentaria local llevaron al gobierno de Filipinas a bloquear un acuerdo de inversión de China y Mozambique se ha resistido a la llegada de los campesinos chinos que desplazarían a los lugareños.
Otros argumentan que el proyecto da Ucrania le da la oportunidad de aumentar las exportaciones de alimentos. Desde la desintegración de la Unión Soviética, el país ha sido lento para privatizar y desarrollar plenamente su industria agrícola. Fuente
Fuente: Quartz
No hay comentarios:
Publicar un comentario