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viernes, 20 de septiembre de 2019

La gran estafa llamada Dólar y la caída del imperio, versión definitiva

La gran estafa llamada Dólar y la caída del imperio

Artículo de mi autoría publicado hace cinco años, artículo que era premonitorio de lo que sucede en el presente pero que entonces nadie hablaba del tema; ahora todo mundo habla de ello pero yo lo anticipé antes que los demás.  Entonces todos me decían que no sabía de lo que hablaba, que eso nunca pasaría, pero hoy vemos como se está cumpliendo aquello que advertí hace tiempo. 

El "sueño americano" no es más que la hipoteca del pueblo estadounidense; hipoteca que tendrán que pagar tarde o temprano.

Los estadounidenses hipotecaron sus vidas en el momento que aceptaron que un Banco privado (la Reserva Federal) se encargara de la emisión del dinero, y eso es así porque esa institución abandonó el patrón oro a favor de un sistema que se basa solo en el valor del dinero que le confiere la confianza que se deposita en él; este sistema del billete-patrón-confianza es de un valor virtual y relativo, porque no hay un valor real en el dinero, ni es posible su convertibilidad a un bien físico u objeto de valor; solo es posible comprar algo con él, porque el que lo recibe como pago tiene la confianza que a su vez le aceptarán ese billete por un objeto con un valor equivalente al que él dio a cambio.

Pero aquí el truco era convertir al dólar estadounidense en única divisa (moneda) de reserva internacional; esto es, que fuera la única moneda con que se pagara el intercambio comercial entre países; pero para lograr este objetivo era necesario abandonar el patrón oro, por que las reservas en oro de los EEUU eran insuficientes para respaldar todo el dinero emitido, y además como ya no estaría respaldado por el oro, ya no era necesario tener grandes cantidades de oro almacenadas, y tampoco había ya la necesidad de inventariar las reservas de oro ni entregar un informe periódico al pueblo y al gobierno estadounidense, y mucho menos, al mundo.

Entonces, como se desechó el patrón-oro se dejaron de contabilizar las reservas previamente almacenadas de oro del gobierno estadounidense, y es así como desde hace décadas se desconoce con exactitud cuánto oro posee Estados Unidos; tanto es así, que cuando Alemania quiso comprobar si aún estaba en las bodegas su oro que le dio a guardar al gobierno estadounidense, no les permitieron verlas, ni siquiera ingresar a las bodegas donde presuntamente se guardaban, solo les mostraron algunos lingotes pero el total nunca lo vieron; pero se sabe a ciencia cierta que ese oro alemán que guardaba EEUU ya fue vendido a China (más específicamente fue dado en pago), y ya fue fundido para hacer nuevos lingotes que ya no tienen el sello del banco alemán, el Deutsche Bundesbank. 

Pero volviendo al tema del dólar, una vez que el mundo lo aceptó como moneda de reserva mundial el mundo se inundó de dólares americanos; pero como la población mundial sigue creciendo, por consiguiente la economía lo hace también y, por lo tanto, se sigue demandando dólares de una manera constante; así que la Reserva Federal Estadounidense, la FED, sigue imprimiendo más dólares, y lo hace de tal manera que logran un equilibrio entre la oferta y la demanda, para así mantener su valor; pero si por algún motivo se imprimieran más dólares de los que demanda el mercado, se correría el riesgo de una devaluación del dólar; eso suponiendo que la FED y el gobierno estadounidense sean transparentes en los informes de sus balances financieros, porque si se diera el caso citado la solución sería bastante sencilla para ellos:

Simplemente retirarían dinero de circulación, dinero que no se vuelve a poner en circulación nunca más (con lo que "mágicamente" se elimina la deuda creada al imprimir ese dinero), pero una vez que necesiten imprimir más dinero, pues simplemente lo hacen y ya, y así se mantiene el equilibro entre la oferta y la demanda.

Pero, ¿qué pasaría con los bienes que los EEUU compró con esos dólares retirados de circulación?, pues simplemente sería como si el mundo se los hubiese regalado, así nomás, como un verdadero robo. Esta es la mayor estafa de la historia de la humanidad. Así como el mundo no sabe a ciencia cierta cuanto oro tiene los EEUU, tampoco sabe cuánto dinero ha fabricado, pero eso sí, todas las naciones del mundo tienen sus bodegas llenas de dólares estadounidenses.

Pero, ¿qué pasaría si el mundo perdiera la confianza en el dólar americano?, pues simplemente se devaluaría y la caída sería tan fuerte a medida que más países dejaran de utilizarlo; entonces todas las naciones del mundo se desharían de sus dólares y el único país que se vería obligado a recibirlos como medio de pago sería precisamente la Unión Americana; por consiguiente, habría cantidades enormes de dólares regresando a los EEUU haciendo muchísima mayor la oferta que la demanda, de tal manera que el Dólar sufriría una devaluación brutal, prácticamente no valdría nada y ninguna nación volvería a aceptar moneda estadounidense como medio de pago, aunque los estadounidenses la cambiaran por otra moneda, como por ejemplo, el Amero. Eso hará comenzar a pagar al pueblo estadounidense todos los bienes que por tantas décadas recibió "regalados"; comenzarían a pagar la hipoteca en que se ha convertido su vida, hipoteca en que los dejó la FED; en otras palabras, tendrían que empezar a pagar la inmensa deuda que representa cada Dólar emitido hasta la fecha

Pero en todo esto, no solo perderían los EEUU, lo haría el mundo entero, pero en el pecado llevan la penitencia.

El mundo perdería bastante, cuantos más dólares posea una nación (o persona), más "dinero" perderá, porque esos dólares almacenados se harán polvo. Esta es la verdadera razón de la supervivencia del dólar: porque nadie quiere perder sus ahorros.

Los principales perdedores serian China, Japón, Irlanda, Arabia Saudita, Rusia, etcétera; es decir, las naciones que tengan más reservas monetarias en Dólares.

Por eso es que no dan el paso definitivo para acabar con el dólar de una buena vez, además de que no son solo dólares físicos los que tienen en reserva, también son los principales poseedores de bonos del tesoro estadounidense, que por supuesto, también están denominados en dólares; entonces, si los EEUU les pagan esas cantidades establecidas en esos bonos, pues para el caso da lo mismo, porque siguen siendo Dólares.

Por eso es que los principales acreedores de los EEUU son ellos mismos (los países que acabo de mencionar), pero cometieron el error de aceptar los bonos del tesoro estadounidense denominados solo en DÓLARES, en vez de en oro, plata, petróleo o algún otro bien con valor intrínseco. Pero claro que ni China ni Rusia ni Japón se van a quedar así tan tranquilos, ellos van a exigir el pago de esa deuda y por supuesto no van a querer dólares, ellos van a exigir otra cosa que tenga un valor real; es así como se desatará la Tercera Guerra Mundial, y por primera vez el suelo estadounidense va ser invadido militarmente por potencias extranjeras.

Pero volviendo al tema del dólar, aún no es el momento de su destrucción por las razones ya mencionadas, pero indudablemente tendrá que suceder, y entre más pronto mejor para ellos (los acreedores de los EEUU).

Pero, ¿cuál es el mejor camino para lograrlo?, por supuesto, no es así como nomás lanzar su sustituto y ya, no, antes de eso ellos tienen que deshacerse de sus reservas de dólares y almacenar grandes cantidades de oro, o plata, o algún otro metal valioso para respaldar la nueva divisa de reserva e intercambio mundial, que por supuesto, será acuñada por ellos mismos, (como por ejemplo los BRICS). Esa es la razón de que ellos estén aumentando constantemente sus reservas de oro.

Además, en el supuesto de que se hiciera hoy mismo, ciertamente el mundo sufriría las consecuencias, pero la peor parte la llevarían los estadounidenses, y por mucho. Y la razón es porque todas las demás monedas solo están en circulación en sus respectivos países de origen, además de que en algunos casos están respaldadas por economías muy fuertes y desarrolladas. Así que, para las economías desarrolladas y fuertes no les será demasiado difícil salir del atolladero, pero a los estadounidenses les será imposible; no se levantarán por décadas, eso en el supuesto de que subsistieran como nación. A fin de cuentas, el mundo sería mejor sin el dólar y sin los EEUU como potencia hegemónica, ni siquiera como potencia menor. Y eso es una gran motivación para CHINA y RUSIA para continuar con este proyecto de desdolarización mundial.

Y en esto del oro, pasa algo parecido al papel moneda; se emite papel-oro entre las instituciones bancarias, y, o, financieras y casas de bolsa; es decir, contratos sobre futuros de oro, y de esa manera se comercializa el oro, pero no en forma física, cuando menos no en las grandes transacciones del metal áureo. Esas grandes operaciones de compra-venta de oro se hacen suponiendo que ése oro está almacenado en alguna parte del mundo pero sin comprobarlo físicamente. De esta manera la FED (o cualquier otra institución fraudulenta como ellos) puede lanzar ese oro-papel sin un respaldo real verificable, porque nadie se molesta en hacerlo, solo dan por hecho de que es cierto que ese oro existe en las bodegas de tal o cual banco; solo es confianza, un acto de fe, pero en realidad no hay una comprobación verídica de su existencia (del oro).

Tal vez esa sea la razón de tantos negocios pequeños y grandes que han aparecido en el mundo para comprar oro y plata, porque los que están almacenando esos metales se están preparando para el colapso económico que se avecina, porque al final los que tengan esos metales serán los poderosos y ricos de mañana.

Los únicos que ganan con un esquema como este, con el esquema financiero actual donde el Dólar es la moneda de reserva mundial, son los que fabrican ese "dinero" ficticio o fíat (los Dólares), y por supuesto que no es el pueblo estadounidense -aunque en alguna medida si se ven beneficiados-, porque no es su gobierno el que los emite sino la FED, y la FED es en realidad un banco privado, no público.

Los verdaderos ganadores en todo esto son los señores de la Reserva Federal; esto es, la élite gobernante, la élite financiera-bancaria de Wall Street y demás centros de poder financiero del mundo.

Para decirlo claramente: el que gana es el Gobierno Mundial que nos gobierna desde las sombras a través de sus marionetas, los políticos. Ellos son realmente los que se quedan con todo, con todas las cosas de valor que les damos a cambio de su "dinero" ficticio.

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