El portavoz del Ministerio chino de Defensa, Tan Kefei, lanzó esa advertencia el sábado después de que los medios de comunicación británicos informaran sobre el posible despliegue del portaviones más nuevo del Reino Unido, el HMS Queen Elizabeth, en el sur de China en los próximos meses, como parte de la primera misión operativa del buque.
“China cree que el mar de la China Meridional no debería convertirse en un mar de rivalidad entre grandes potencias dominado por armas y buques de guerra”, subrayó el responsable chino durante una rueda de prensa.
Tan culpó a los países extrarregionales por la militarización del estratégico mar del Sur de China y se opuso al hecho de que estas potencias envíen sus buques de guerra a las aguas chinas a miles de kilómetros de casa para mostrar músculos.
Dejó en claro que el Ejército chino tomará las medidas necesarias para salvaguardar sus intereses y proteger su soberanía, seguridad y desarrollo, así como la paz y la estabilidad en dicho mar.
El vocero chino destacó que el poderío militar de China siempre ha contribuido a construir la paz en el mundo, por lo que instó a las potencias occidentales a “corregir sus prejuicios y tener una visión racional de China y su desarrollo militar”.
A principios de febrero de 2019, el entonces ministro de Defensa británico, Gavin Williamson, había adelantado la decisión de la Marina de su país de desplegar el portaviones HMS Queen Elizabeth en el mar del Sur de China, con el llamado objetivo de contribuir a “hacer realidad una Gran Bretaña global”.
El mar del Sur de China o mar de la China Meridional es una extensión muy disputada del océano Pacífico. Pekín reclama casi un 90 % de los territorios; varios países, entre ellos Filipinas, Vietnam, Malasia y Brunéi, también tiene reclamaciones territoriales.
Aunque Estados Unidos y sus aliados occidentales como el Reino Unido no tienen reclamos sobre esas aguas, pero están muy involucrados en la disputa, enviando sus buques militares al mar de la China Meridional para proteger supuestamente la “libertad de navegación”.
Por su parte, Pekín rechaza la presencia militar de EE.UU. y otras potencias occidentales en sus aguas sureñas, y acusa a Washington de tratar de dominar este mar y militarizar la zona.
No hay comentarios:
Publicar un comentario