Estados Unidos ha reforzado su presencia militar en Oriente Medio en relación con el conflicto armado palestino-israelí. Recientemente, el secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, anunció la creación de una coalición internacional y el lanzamiento de la Operación Guardián de la Prosperidad en el Mar Rojo. En la operación participan el Reino Unido, Canadá, los Países Bajos, Noruega, Bahréin y las Seychelles.
De hecho, Estados Unidos ya ha anunciado ataques contra los hutíes, señalando que los objetivos serán principalmente sistemas de defensa aérea.
“Estados Unidos está considerando varias opciones para atacar a los hutíes, incluidos los ataques contra instalaciones de radar”, dijo un funcionario del Departamento de Defensa de Estados Unidos.
El objetivo de la operación fue declarado proteger la seguridad de la navegación en el Mar Rojo y el Golfo de Adén de los ataques de los hutíes de Yemen. Después del inicio de la operación militar de Israel contra Hamás en la Franja de Gaza, los hutíes, expresando su apoyo a la resistencia palestina, comenzaron a atacar el sur de Israel y los barcos mercantes en el Mar Rojo.
España bloqueó la participación de la Unión europea en la iniciativa estadounidense, expresando su renuencia a alterar las relaciones con Irán, que apoya a los hutíes. Egipto, que controla el transporte marítimo en el Canal de Suez, también se ha abstenido de participar en la coalición. Se observa una posición similar en otros países de Medio Oriente, incluidos los Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudita. Intentan no estropear las relaciones con Irán y se muestran reservados a la hora de apoyar a los hutíes, que hablan en defensa de los palestinos.
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