“Se trata de un anuncio importante: no tenemos víctimas, ni heridos, ni siquiera un rasguño”, dijo el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, tras confirmar que fueron atacados por misiles antitanque.
Netanyahu negaba con dichas palabras la existencia de víctimas en el ataque del Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá) a vehículos militares israelíes que se dirigían hacia Avivim, en la región palestina ocupada de Galilea (Al-Yalil).
No obstante, poco después, los medios israelíes publicaron varias fotos y vídeos donde se veía cómo los militares israelíes trasladan a las víctimas al hospital Rambam, en la ciudad portuaria de Haifa (norte).
Se trata de un anuncio importante: no tenemos víctimas, ni heridos, ni siquiera un rasguño”, dijo el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, tras confirmar que fueron atacados por misiles antitanque de Hezbolá.
El centro médico Rambam anunció la llegada de dos soldados, pero, aproximadamente una hora después el portavoz de las fuerzas militares israelíes, el general Ronen Manelis, aseguró que no había habido víctimas militares.
Manelis se negó a comentar las imágenes que muestran el helicóptero llevando a los soldados al hospital.
“Más tarde, Rambam publicó un aviso inusual en el que se decía que los soldados trasladados en helicóptero habían sido examinados y después dados de alta, ya que no sufrían heridas”, según informó el diario israelí Haaretz.
Contrariamente, los medios libaneses confirmaron que los que viajaban a bordo del vehículo blindado israelí resultaron muertos o heridos como la consecuencia del ataque de represalia de Hezbolá.
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