“¿Os imagináis que pierdo? ¿Qué voy a hacer el resto de mi vida? Voy a decir que he perdido ante el peor candidato de la historia de la política. Es posible que tenga que abandonar el país, no lo sé”, ha dicho este viernes el actual inquilino de la Casa Blanca.
En declaraciones ante miles de simpatizantes en un mitin electoral en el condado de Macon, en el estado de Georgia (sureste), Trump ha reconocido que, para él, es mucha presión competir con Biden en estas elecciones presidenciales que se celebrarán el próximo 3 de noviembre.
En otro momento de su discurso, ninguneando la recomendación médica sobre el uso de la mascarilla para no infectarse del nuevo bicho, el magnate neoyorquino ha criticado a Biden por utilizarla siempre en sus presentaciones públicas.
“La mascarilla que lleva es tan grande que le cubre toda la cara (…) Biden generará pesimismo, pobreza y declive”, ha reprochado Trump, quien en la mayoría de las encuestas a nivel nacional aparece por detrás del candidato demócrata.
En esta coyuntura, el gobernante republicano ha sostenido, en algunas ocasiones, que las elecciones estadounidenses están manipuladas y, en otras, pese a que sufragar dos veces es un delito, ha instado a sus partidarios a votar por correo y luego en persona, para asegurarse de que se cuente su sufragio.
Además, se ha negado a comprometerse a un traspaso pacífico del poder en caso de una derrota en las elecciones, lo que ha provocado reacciones indignadas tanto de su oponente demócrata como dentro de las filas republicanas.
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