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martes, 9 de febrero de 2021

El ambicioso plan de Irán con la vacuna Sputnik V



Irán ha comprado 20.000 dosis de la vacuna rusa Sputnik V. En el futuro, planea adquirir hasta 2 millones de dosis y luego podría producir su propia vacuna con el uso de las tecnologías rusas, comunicó a Sputnik el viceministro de Salud de Irán, Mohamad Reza Shanehsaz.

El primer lote del medicamento ruso ha sido bastante pequeño. "Teniendo en cuenta los requisitos especiales para el transporte de esta vacuna, tuvimos que garantizar las condiciones para mantener la temperatura a -18 grados centígrados: desde el fabricante hasta el aeropuerto de Moscú, luego al aeropuerto Imán Jomeiní y después al almacén. En cada etapa, la logística tenía que estar estrictamente controlada", explica Reza Shanehsaz, director de la Organización de Control de Medicamentos y Alimentos del país.

Por lo tanto, no se compró un gran volumen de vacunas para el primer ensayo. Afortunadamente, no hubo ningún problema y el envío llegó sano y salvo a su destino, aclara el funcionario.

También hay que recordar que existe una gran demanda de la vacuna mientras que las capacidades de las empresas fabricantes son limitadas. Inicialmente se acordó el envío de 2 millones de dosis y las autoridades iraníes esperan que a finales de marzo puedan conseguir entre 1 y 2 millones de dosis de la vacuna rusa.

Una de las principales ventajas de Sputnik V son sus condiciones de almacenamiento, subraya el viceministro. La temperatura de -18 grados centígrados es bastante fácil de alcanzar, a diferencia de los -70 que requieren otras vacunas.

"Irán tiene una población de unos 85 millones de personas. La necesidad de vacunación es de unos 170 millones de dosis. Nuestro objetivo es que todos los habitantes de nuestro país tengan la oportunidad de vacunarse. Naturalmente, no es posible suministrar tantas dosis de vacunas a través de una sola fuente", recalca.

El país persa tiene tres opciones para obtener las vacunas necesarias: la producción propia de varias empresas farmacéuticas nacionales; la compra de vacunas importadas a través del mecanismo COVAX —una alianza para garantizar el acceso equitativo a las vacunas— y las negociaciones directas con fabricantes extranjeros de confianza. En el caso de Rusia, Teherán ha usado la tercera opción al negociar con el Fondo de Inversión Directa de Rusia.

El grupo prioritario para la vacunación es ahora el de los médicos que trabajan en las unidades de cuidados intensivos. Luego, gradualmente, se añadirán otros grupos a la lista de vacunación: pacientes del grupo de riesgo y personas con enfermedades crónicas.
 
Satisfacer la necesidad propia y exportar

Por ahora, la prioridad es vacunar a las personas de riesgo. Luego, con el despliegue y el aumento de la producción de vacunas propias por parte de empresas farmacéuticas independientes y con la ayuda de la transferencia de tecnología y la producción conjunta con algunos países, será posible satisfacer las necesidades de toda la población.
 
"La producción conjunta estará destinada no solo a satisfacer nuestras necesidades nacionales, sino también a exportar vacunas a otros países. Nuestro próximo plan, por tanto, es ayudar a otros países de la región (de Oriente Medio) a satisfacer sus necesidades de vacunas contra el coronavirus", revela Reza Shanehsaz.

Respecto al debate que tuvo lugar en la república islámica sobre la aprobación de Sputnik V para el uso, el viceministro destacó que es el mismo en todo el mundo, aunque los temores de los médicos se disiparon tras la publicación de artículos científicos sobre la seguridad de la vacuna en prestigiosas revistas científicas, como Lancet.

"Ahora, tenemos varios fabricantes de vacunas en nuestro país, pero eso no significa que hayamos renunciado a aprender de los países que tienen conocimientos avanzados en esta materia. Especialmente de un país como Rusia, donde hay un enorme potencial para trabajar juntos", continúa.

Irán espera involucrar al sector privado en la cooperación y, junto con las empresas farmacéuticas rusas, poner en marcha la producción conjunta de la vacuna en Irán, sobre todo porque algunos de los especialistas persas ya han sido aprobados por Rusia.

El principal objetivo de esta cooperación con la Federación de Rusia es satisfacer la necesidad de las vacunas lo antes posible, y la siguiente meta es exportar estas vacunas. Varias empresas iraníes, tras conocer las instalaciones y la infraestructura del fabricante ruso, confirmaron que podrán proporcionar la calidad y el nivel correspondientes de producción de vacunas. Además, dada la gran demanda y necesidad de de producción de Sputnik V en el mundo, las capacidades de las empresas iraníes ayudarán a aumentar la capacidad de producción rusa, aseguró el funcionario iraní.
 
"Irán, en colaboración con las empresas rusas, dada su situación geográfica estratégica, puede satisfacer las necesidades tanto de los países del Golfo Pérsico, con los que mantenemos relaciones amistosas, como de otros países de la región oriental. Será una asociación en la que todos saldrán ganando", resume el especialista.

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