En declaraciones ofrecidas este martes a la cadena yemení de noticias Al Masirah, el subjefe del Ejército yemení, el general de división Ali Hamud al-Mushaki, ha subrayado que la operación de las fuerzas yemeníes denominada ‘Tormenta 2’ demostró el aumento de las capacidades de disuasión del país y que tal poderío puede llegar a las zonas más profundas de los países de la coalición agresora saudí-emiratí.
“Tenemos armas que de apuntar y disparar, y drones, pueden llegar a las profundidades de todos los países agresores o partidarios de la coalición que queramos”, acentuó el alto mando militar para luego asegurar que las Fuerzas Armadas yemeníes tienen un banco de información de objetos sensibles de los países de la coalición, que lidera Arabia Saudí contra Yemen.
Además, alertó que las tropas yemeníes tienen bajo vigilancia a los países de la coalición, tal como ha quedado constatado en la operación ‘Tormenta 2’, indicó Al-Mushaki.
El Ejército y los comités populares de Yemen realizaron el lunes la operación ‘Tormenta 2’ que consistió en ataques con misiles y drones al corazón de los Emiratos Árabes Unidos (EAU) y Arabia Saudí, en reacción a las últimas agresiones de estos dos países árabes contra la nación yemení.
Los EAU forman parte de la llamada coalición —liderada por Arabia Saudí y respaldada por EE.UU. y el Reino Unido— que inició en marzo de 2015 una campaña bélica contra la nación yemení con el fin de llevar de vuelta al poder al gobierno del expresidente yemení Abdu Rabu Mansur Hadi y aplastar el movimiento de resistencia popular Ansarolá.
Ante tal situación, las fuerzas armadas yemeníes y los comités populares se hacen cada vez más fuertes, de modo que Riad y sus socios no han logrado ninguno de sus objetivos y su agresión solo ha provocado muerte y desplazamiento de millones de los civiles yemeníes, así como la destrucción de la infraestructura y la propagación de hambruna y enfermedades infecciosas en el país más pobre del mundo árabe.
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