El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, advirtió el viernes al Gobierno de Irak que Turquía “limpiará” las montañas iraquíes de Qandil, de la presencia de kurdos, si Bagdad no lo hace.
“Esto es una advertencia. O Irak limpia su territorio de estos elementos o nosotros lo haremos por ellos”, dijo Erdogan durante un acto con sus simpatizantes en la ciudad norteña de Rize, el lugar donde nació.
El mandatario señaló que anteriormente había conversado con el presidente iraquí, Fuad Masum, y le había exigido expulsar a los kurdos que viven en la montañas de Qandil no obstante, señaló que el alto mando iraquí le pidió tener paciencia.
Igualmente Erdogan aseguró que su supuesta guerra contra los terroristas va en buen camino y que pronto saldrá victorioso a pesar de los muchos soldados turcos que mueren cada día a causa de estas operaciones.
Por otra parte volvió a arremeter contra el Partido Democrático del Pueblo (HDP, por sus siglas en turco) por sus apoyos a los kurdos y sus críticas al Gobierno de Ankara por atacar a las fuerzas kurdas.
“Estos (los integrantes del HDP) o vienen al Parlamento para participar en la política turca o encontrarán su verdadera posición y se enfrentarán a las consecuencias”, sostuvo.
Desde el 24 de julio, Turquía ha lanzado ataques no coordinados contra Irak y Siria, los cuales han provocado el disgusto de los Gobiernos de Bagdad y Damasco.
Mientras el Gobierno de Ankara considera que sus ataques contra la soberanía de sus vecinos tienen como meta luchar contra el grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe), al cual hasta la fecha suministraba ayudas logísticas y armamentísticas, las Unidades de Protección del Pueblo Kurdo (YPG, por sus siglas en kurdo) indicaron por medio de un comunicado, que “en vez de apuntar contra las posiciones del EIIL, las fuerzas turcas atacan nuestras defensas”.
Estos ataques comenzaron justo cuando las fuerzas kurdas estaban cerca de cortar el acceso de Daesh al territorio turco, su mayor benefactor.
15 de agosto de 2015 hgn/ktg/msf
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