Ezequiel 47.8-9
Casi diez veces más salado que el océano, nada puede vivir en el Mar Muerto, o bien, eso es lo que los científicos pensaban hasta hace poco.
Una investigación científica ha demostrado la existencia de vida en el fondo del mar, pero debido a un conjunto único de circunstancias, signos de vida han comenzado a aparecer en sus mismas costas, precisamente, como está escrito en el libro de los Profetas.
Una mujer joven durante una caminata se sorprendió cuando descubrió recientemente estanques de agua dulce con peces en las orillas del Mar Muerto.
Samantha Siegel, una mujer judía que vivía en Jerusalén, a menudo toma viajes al desierto. En una visita reciente, se encontró con una visión imponente, con implicaciones de gran alcance: una profecía que aparece ante sus ojos, algo que parecían contradecir las leyes de la naturaleza.
El Mar Muerto es, como su nombre lo indica, muerto. Más de 400 metros bajo el nivel del mar, es el punto más bajo en tierra firme. Ninguna vida puede existir en su aguas saladas y sus orillas están cubiertas con una gruesa capa de sal que mata a cualquier planta.
Su falta de hospitalidad se ha documentado durante siglos. Un mosaico en el suelo de una iglesia en Madaba, Jordania, que muestra un mapa de los peregrinos bizantinos en su camino hacia la Tierra Santa, ilustra esto. Ofrece una imagen de peces nadando por el río Jordán y luego da la vuelta una vez que llegan a las aguas del Mar Muerto.
La Biblia, sin embargo, describe una imagen muy diferente de la región. Lot iba al valle, donde el Mar Muerto es ahora y vio una región muy fértil y bien regada.
Y alzó Lot sus ojos, y vio toda la llanura del Jordán, que toda ella era de riego, antes que Hashem destruyó Sodoma y Gomorra, como el huerto de Hashem. Génesis 13:10
La Biblia relata que el panorama cambió luego de la destrucción de fuego y azufre de Sodoma y Gomorra, y se volvió el valle en un desierto. De hecho, para las personas que visitan el Mar Muerto hoy sería difícil imaginar un jardín en la región árida.
Aún más sorprendente son las profecías mesiánicas que el agua fluirá al este de Jerusalén en el Mar Muerto, y estas aguas amargas se llenarán de peces y el desierto circundante estará lleno de vida.
Y ME DIJO: ESTAS AGUAS SALEN HACIA LA REGIÓN ORIENTAL Y DESCIENDEN AL ARABÁ; LUEGO SIGUEN HACIA EL MAR Y DESEMBOCAN EN EL MAR; ENTONCES LAS AGUAS DEL MAR QUEDAN PURIFICADAS. Y SUCEDERÁ QUE DONDEQUIERA QUE PASE EL RÍO, TODO SER VIVIENTE QUE EN ÉL SE MUEVE, VIVIRÁ. Y HABRÁ MUCHÍSIMOS PECES, PORQUE ESTAS AGUAS VAN ALLÁ, Y LAS OTRAS SON PURIFICADAS; ASÍ VIVIRÁ TODO POR DONDE PASE EL RÍO. EZEQUIEL 47: 8-9
El nivel del agua en el Mar Muerto ha estado retrocediendo en la fantástica velocidad de hasta un metro cada año. Esto es debido al agua que está siendo desviada del río Jordán para fines agrícolas y la evaporación causada por las obras minerales del Mar Muerto. El nivel del agua caído, ha provocado hundimientos que aparecen en las orillas del Mar Muerto. En una visita a la región árida, Siegel descubrió que muchos de estos grupos han estado llenándose con agua fresca dulce, y aún más increíble, de peces.
La prueba es innegable. Siegel produjo un vídeo en el que los peces se ven claramente nadando en las orillas del Mar Muerto, y se filmó a sí mismo nadando en una gran piscina rodeada por las plantas verdes.
El agua dulce en el Mar Muerto es un claro ejemplo de cómo los profetas fueron capaces de ver las cosas que permanecían ocultas a los científicos desde hace miles de años.
fuente: http://evangelionoticias.com/2016/07/27/ezequiel-47-8-9-el-cumplimiento-de-la-profecia-del-mar-muerto-ha-comenzado/
Fuente: Breakind Israel News
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