El presidente de Rusia encarga medidas adicionales para mejorar la preparación de su país para la movilización militar tras el ejercicio militar Zapad-2017.
“El ejercicio Zapad-2017 reveló ciertos defectos. Se deben estudiar cuidadosamente y tomar medidas para fortalecer la preparación para la movilización”, ha recalcado el presidente Vladimir Putin en una reunión con altos mandos militares celebrada este miércoles en la ciudad de Sochi.
El mandatario ruso ha reiterado asimismo la necesidad de evaluar el potencial de la industria de defensa rusa para aumentar la producción de armamento con rapidez.
“La capacidad de la economía para aumentar rápidamente la producción de productos defensivos en tiempo de guerra es una de las condiciones clave para garantizar la seguridad militar del Estado. Todas las empresas estratégicas (…) deben estar preparadas para ello”, ha añadido Putin.
El ejercicio táctico conjunto ruso-bielorruso Zapad-2017 se llevó a cabo entre el 14 y el 20 de septiembre en seis campos de prueba y dos áreas de Bielorrusia, y en tres campos de pruebas de Rusia. Participaron casi 13.000 soldados con 70 aviones y helicópteros, 680 vehículos de tierra (incluidos alrededor de 250 tanques) y múltiples lanzadores de cohetes. Los monitorizaron observadores de siete países, incluidos miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
El ejercicio Zapad-2017 reveló ciertos defectos. Se deben estudiar cuidadosamente y tomar medidas para fortalecer la preparación para la movilización”, dice el presidente de Rusia, Vladimir Putin.
Los miembros de la Alianza Atlántica expresaron en reiteradas ocasiones su preocupación sobre Zapad (“oeste”, en español). El primer ministro de Estonia, Jüri Ratas, cifró en unos 100.000 efectivos el número de soldados movilizados.
Moscú tachó de “infundada” la preocupación de los países occidentales sobre Zapad, reiterando que era un ejercicio meramente defensivo, diseñado para hacer frente a las posibles amenazas. Rusia lleva a cabo estas maniobras cada cuatro años.
Moscú culpa a Occidente de un aumento de las tensiones por expandir la OTAN hacia el este y acumular “fuerzas de guerra” en los países fronterizos con Rusia. El bloque militar justifica que el incremento de su despliegue es una respuesta a la anexión rusa de Crimea en 2013.
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