"Los propios servicios de inteligencia ucranianos están directamente involucrados en esto", insistió Bórtnikov en una rueda de prensa.
En este contexto, el jefe del FSB destacó la necesidad de reconocer el Servicio de Seguridad de Ucrania como organización terrorista.
De acuerdo con el jefe del FSB, el atentado terrorista del Crocus City Hall les hacía falta a los servicios especiales occidentales y ucranianos para desestabilizar la situación y hacer cundir el pánico en Rusia. Además, agregó que se han recibido los datos preliminares sobre la implicación —aparte de Ucrania— del Reino Unido y EEUU en el ataque.
La persona que ordenó el atentado terrorista en el Crocus City Hall aún no ha sido identificada, pero "Rusia ve quién lo organizó y quién lo reclutó y hará todo lo posible para identificar a los organizadores", precisó Bórtnikov y añadió que el organismo, junto con los servicios especiales asociados de países amigos, trabaja ahora para identificar a todos los implicados.
Actualmente, se está trabajando activamente con los 11 detenidos en el caso, el círculo de cómplices identificados será más amplio, comentó.
"El jefe la Dirección Principal de Inteligencia del Ministerio de Defensa de Ucrania, Kirilo Budánov, es un objetivo legítimo de las fuerzas armadas rusas, como lo son todos los que cometen crímenes contra Rusia", indicó Bórtnikov.
Asimismo, enfatizó que la amenaza de actos terroristas persiste en el territorio de Rusia.
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