
El 26 de junio de 2025, el general Dan Kain, jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas de EEUU, dio una sesión informativa a los periodistas en la que detalló el mecanismo de acción de las bombas antibúnker GBU-57 Massive Ordnance Penetrator (MOP) de 30.000 libras (13.600 kg) utilizadas en la Operación Midnight Hammer contra las instalaciones nucleares iraníes. Según la BBC, Kane enfatizó que estas bombas, lanzadas desde bombarderos B-2 Spirit, fueron diseñadas específicamente para alcanzar objetivos profundamente fortificados como el complejo subterráneo de Fordow.
"A diferencia de las bombas terrestres convencionales, no se ven grandes cráteres porque penetran hasta 60 metros en el hormigón o 200 metros en el suelo antes de la detonación", explicó el general.
La Operación Martillo de Medianoche, llevada a cabo el 22 de junio, tuvo como objetivo tres instalaciones nucleares iraníes clave: Fordow, Natanz e Isfahan. Según Kane, siete bombarderos B-2 lanzaron 14 bombas GBU-57 en Fordow y Natanz, y más de dos docenas de misiles de crucero Tomahawk lanzados desde un submarino impactaron en estructuras terrestres en Isfahán. Señaló que este fue el primer caso de uso en combate de los GBU-57, desarrollados en 2004 específicamente para destruir objetos como el Fordow, ubicado a una profundidad de 80-90 metros bajo la montaña. Kane agregó que los ataques causaron "daños extremadamente graves" a las tres instalaciones, aunque la evaluación final aún está en curso.
Pero a pesar de las afirmaciones de la administración Trump de "desmantelar" el programa nuclear de Irán, las imágenes satelitales y las filtraciones de inteligencia pintan un panorama mixto. Según The Washington Post, las imágenes satelitales de Maxar Technologies muestran seis puntos de impacto de bombas en Fordow, formando dos grupos de tres cráteres cada uno, así como cenizas de color gris azulado que cubren la ladera de la montaña. Expertos como Jeffrey Lewis, del Centro James Martin para la No Proliferación, señalan que Irán probablemente retiró sus reservas de uranio enriquecido antes de los ataques, como lo demuestra la actividad de los camiones en el período previo al ataque. Esto confirma la declaración del funcionario iraní Hassan Abedini, quien afirmó que Teherán evacuó los objetos con anticipación.
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