"Europa es un club de democracias y entrar es voluntario. Estamos en el club para cumplir las reglas y eso es lo que hay que hacer. Lo que no puede ser es que a cambios políticos en los países respondamos con nuevas reglas, porque entonces Europa se colapsa", ha dicho este lunes el ministro español de Hacienda, Cristóbal Montoro.
En declaraciones a la cadena pública española TVE, Montoro ha instado al nuevo Gobierno heleno a aplicar las medidas de austeridad tal y como lo hizo la administración anterior y que no sueñe con aumentar su gasto pública, ya que en este caso ha optado por el “camino equivocado”.
"Es fácil llegar al gobierno y decir 'oye, voy a subir este gasto, el otro y el de más allá (…) Pero la cuestión es, ¿de dónde sale este dinero? ¿De los Griegos? ¿Del resto de los europeos o del resto del mundo?, ¿Quién te va a dejar ese dinero? Esta es la cuestión", ha añadido.
El ministro español ha destacado que el éxito de su país a la hora de promover el crecimiento económico en 2014 y generar empleos es el fruto de las rigurosas medidas de austeridad que ha adoptado Madrid en los últimos años.
El nuevo primer ministro griego, Alexis Tsipras, en sus primeras palabras tras ganar las elecciones legislativas, aseguró el fin del “círculo vicioso de la austeridad” y dejó en claro que “la troika no tiene sitio en el futuro de este país”.
En 2010, Grecia acordó con la troika -la Comisión Europea (CE), el Banco Central Europeo (BCE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI)- dos planes de rescate por un total de 240.000 millones de euros, a cambio de numerosos recortes (reducción de sueldos y pensiones, aumentos e introducción de impuestos) y reformas estructurales.
Después de seis años de recesión, Grecia volvió a crecer en 2014, pero tiene un desempleo superior al 25 %, el más alto de la Eurozona.
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