El Estado Islámico de Irak y el Levante ha lanzado una nueva ofensiva terrorista contra los iraníes, sus seguidores y contra otros chiítas. Dio inicio este domingo, 2 de febrero con un ataque a un autobús en Damasco que transportaba peregrinos libaneses chiítas a los santuarios en Siria. Nueve personas murieron y al menos 20 resultaron heridas. ISIS ha puesto la siguiente mira en el corazón chiíta musulmán, Irán y sus ciudades - especialmente la capital Teherán.
El ataque contra el autobús de Damasco es atribuido por algunas fuentes a un atacante suicida saudí con el nombre de Abu al-Ezz al-Ansari. La afirmación de que los rebeldes sirios Jabhat al-Nusra fueron los autores ha sido falsa, dicen fuentes de inteligencia y de la lucha contra el terrorismo. Este grupo no entra a por reclutas saudíes y ciertamente no a por terroristas suicidas de esa calaña.
ISIS usó a Nusra para ocultar su propia responsabilidad en el ataque y su verdadero objetivo. Nuestras fuentes revelan que el Estado Islámico atacó a los peregrinos chiítas con el fin de llegar a un oficial de alto rango del brazo armado de Hezbolá, que estaba en el autobús.
La sede de Hezbolá en Beirut ha impuesto un silencio profundo sobre su muerte y su identidad. Pero debido a que no podían pretender que la explosión del autobús no sucedió, echó la culpa a "grupos takfir [infieles]" que dicen que colaboran con Israel.
Este ataque reveló más significativamente que Hezbolá ha comenzado a cubrir las pistas en Siria de sus principales hombres de Hezbolá insertándolos entre los peregrinos chiítas que viajan en autobús desde el Líbano a Damasco. Ellos están camuflando los movimientos de sus hombres más importantes en Siria por una red de seguridad elaborada, desde que un ataque aéreo israelí el 18 de enero mató a alrededor de nueve funcionarios de Hezbolá e Irán, incluyendo al general iraní, Ali Allah Dadi.
Sin embargo, los agentes de ISIS fueron capaces de encontrar el autobús y hacerlo estallar, lo que indica una penetración profunda de hostilidad en las fuerzas iraníes y Hezbolá asignadas a Siria para luchar por Bashar Assad.
Consciente de los próximos planes del Estado Islámico, el comandante iraní de las Brigadas Al Qods, el general Qassem Soleimani, realizó una visita no programada a Beirut el pasado jueves, 29 de enero, para mantener conversaciones urgentes con el líder de Hezbolá, Hassan Nasrallah, y sesiones de información para los miembros del consejo militar de la organización. Su preocupación más apremiante era el programa detallado de ISIS, que está listo para ir por una nueva y amplia campaña de terror contra objetivos iraníes y pro-iraníes en el Líbano, Siria, Irak y la patria iraní. FUENTE
Fuente: Debkafile
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