Buscar en este blog

jueves, 4 de enero de 2018

Rusia prepara su industria para construir portaviones



La idea de construir nuevos portaviones para la Armada rusa se considera algo pendiente, debido al enorme coste del proyecto y la falta de usos evidentes para tal poderío marítimo en el contexto actual de las actividades militares de Rusia. Sin embargo, hay pasos concretos enfocados a realizar tal empresa, señala el medio ruso Vzglyad.

El motivo para afirmarlo lo ofrece la modernización de varios astilleros clave rusos. En total, hasta cuatro empresas navales del país pronto serán capaces de iniciar la construcción de un buque de guerra tan grande como un portaviones moderno.



Se trata de los astilleros en San Petersburgo, en Kerch (en Crimea), en Primorie (Lejano Oriente ruso) y en la región de Arjánguelsk (Norte Extremo ruso). En todos los casos, la modernización debe darse por completada para el 2020.

Para la industria rusa tener este potencial, de hecho, es un avance considerable, ya que el único astillero de la ex-URSS apto para realizar obras de esta envergadura se quedó en Ucrania, en la ciudad de Nikoláyev, donde 'nació' el único portaviones ruso en la actualidad, el Almirante Kuznetsov, y sus buques gemelos.

Incluso si la Defensa rusa decidiera invertir en un portaviones en algún momento de los últimos 20 años, el país simplemente carecía de astilleros para construir la enorme nave, destaca Vzglyad.


Con la modernización de las plantas navales, el país obtendrá la capacidad industrial de construir portaviones, pero permanecerán otras cuestiones, como las características del buque, sus usos y el poderío de su grupo aéreo, así como el coste total del proyecto.

Una 'necesidad evidente'

"La teoría de guerra marítima lo tiene claro: una flota oceánica requiere de portaviones y del componente aéreo que proporcionan. Sin la protección de las aeronaves, la flota no podrá actuar libremente", explicó Alexéi Litsis, jefe del Departamento de Diseño del Centro de Investigación Estatal Krilov, responsable del proyecto inicial del portaviones Shtorm y del portahelicópteros Lavina.

Las costas sirias, donde realizó su primera misión de combate el portaviones ruso Almirante Kuznetsov, "afortunadamente, no están muy lejos, y se podían trasladar aviones fácilmente", destacó el ingeniero.

Pero "si se desata algo en algún lugar lejano, pues necesitaremos portaviones", enfatizó.

Otro tema de importancia es la composición del grupo aéreo, sin olvidar el método de despegue de los aviones. En los tiempos de la URSS, se estudiaron ambas variantes posibles: con una rampa de despegue, realizada en el Almirante Kuznetsov, y construir cazas de despegue vertical, como los Yak-38 y los Yak-141.


Los altos cargos militares rusos, al hablar sobre el posible plazo de crear un portaviones para la Armada del país, cautelosamente ponen la fecha de la puesta en quilla del buque no antes del 2025.

Si bien todavía quedan muchas preguntas sobre dónde, de qué tipo y a qué coste construir un sucesor del Almirante Kuznetsov, Moscú, sin hacer mucho ruido, va garantizando que tendrá las capacidades de realizar el ambicioso proyecto, concluye el medio.

No hay comentarios:

Publicar un comentario