La renegociación comercial para alcanzar el nuevo Tratado de México-EEUU-Canadá (T-MEC) pudo colapsar si no se hubiese eliminado la apertura del sector energético al capital privado y la integración norteamericana del sector, dijo el presidente electo Andres Manuel López Obrador en una entrevista.
"El tema se manejó con discreción, no se supo, pero se rompieron las pláticas y se llegó a un punto en el que no había ninguna posibilidad de entendimiento (…), no íbamos a aprobar el tratado en esos términos (…) se tuvo que hacer una consulta al presidente [Donald] Trump sobre lo que proponíamos y, aunque parezca increíble, aceptó nuestro texto, el capítulo de energéticos propuesto era voluminoso; en esencia, era crear una comunidad energética para América del Norte, y quedó en dos párrafos", relató el futuro presidente en entrevista con periodistas el diario La Jornada.
La participación del enviado de López Obrador a las negociaciones en Washington, Jesús Seade, permitió excluir el capítulo energético "que significaba un riesgo para nuestra soberanía", porque consistía en incorporar los principios de la Reforma Energética promulgada por su antecesor Enrique Peña Nieto en 2013, tras ser aprobada por el Congreso mexicano, a la cual el futuro mandatario siempre se opuso.
Trump insistió en el tema con el argumento de que México había aceptado ese modelo de integración energética en la negociación de doce países del Acuerdo Transpacífico, del cual Washington ya se retiró.
La redacción original del capítulo energético del T-MEC consistía en "meter toda la Reforma Energética en el tratado, imagínense lo que significó que no se incluyera el capítulo energético en el tratado", enfatizó
En la redacción final "se reafirma el derecho de México a manejar soberanamente los recursos naturales, en particular el petróleo, cuando se conozca más esta historia, se va a saber lo que esto significó", prosiguió López Obrador.
En los hechos, explica, toda la infraestructura crítica de Petróleos Mexicanos (Pemex) y de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), empresas del Estado mexicano está conectada a la frontera norte con EEUU.
"Las Zonas Económicas Especiales [ZEE] de Peña Nieto eran las vías para sacar los hidrocarburos de EEUU", que vende sobre todo gas natural del sureño estado de Texas.
En los hechos, explica, toda la infraestructura crítica de Petróleos Mexicanos (Pemex) y de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), empresas del Estado mexicano está conectada a la frontera norte con EEUU.
"Las Zonas Económicas Especiales [ZEE] de Peña Nieto eran las vías para sacar los hidrocarburos de EEUU", que vende sobre todo gas natural del sureño estado de Texas.
López Obrador afirma que revertirá la estrategia energética de integración regional y apertura a la inversión privada.
"Esa política ya no aplica porque el pueblo de México eligió un nuevo gobierno, el plan energético diseñado en el periodo neoliberal no se va a llevar a cabo, ya no van a existir las Zonas Económicas Especiales, diseñadas con ese propósito, lo que queremos es rescatar a Pemex y a la CFE, nuestro plan es recuperar las industrias petrolera y eléctrica", enfatizó el futuro presidente.
Sector petrolero de México
Asimismo, Andrés Manuel López Obrador, quien asumirá el 1 de diciebre, afirmó que llamará a las compañías petroleras a realizar reformas similares a las del periodo de nacionalización de 1938.
"Es gravísimo lo que está sucediendo. Tenemos que intervenir; estoy llamando a los trabajadores petroleros en activo y jubilados a que nos ayuden a rescatar a Pemex, a que hagamos algo parecido a lo que se hizo en 1938", dijo.
"Esa política ya no aplica porque el pueblo de México eligió un nuevo gobierno, el plan energético diseñado en el periodo neoliberal no se va a llevar a cabo, ya no van a existir las Zonas Económicas Especiales, diseñadas con ese propósito, lo que queremos es rescatar a Pemex y a la CFE, nuestro plan es recuperar las industrias petrolera y eléctrica", enfatizó el futuro presidente.
Sector petrolero de México
Asimismo, Andrés Manuel López Obrador, quien asumirá el 1 de diciebre, afirmó que llamará a las compañías petroleras a realizar reformas similares a las del periodo de nacionalización de 1938.
"Es gravísimo lo que está sucediendo. Tenemos que intervenir; estoy llamando a los trabajadores petroleros en activo y jubilados a que nos ayuden a rescatar a Pemex, a que hagamos algo parecido a lo que se hizo en 1938", dijo.
Agregó que la producción petrolera de México, que actualmente es de 1,8 millones de barriles diarios, seguirá cayendo hasta los 1,5 millones barriles a mediados de 2019, y el próximo gobierno buscará relanzarla a 2,4 millones de barriles al día en 2024.
"Está así la caída del petróleo, así está, tenemos que detener esto, el cálculo es que vamos a caer hasta un millón 500 mil barriles [a mediados de en 2019] entonces, vamos a tratar de hacer esto para 2024, va significar 2 millones 400 mil barriles; ni pensar en los 3 millones, no se podría", dijo el futuro mandatario trazando gráficas con datos.
López Obrador cuestionó los planes del Gobierno saliente, en materia de producción.
Decían que íbamos a estar produciendo 3 millones de barriles diarios (…) es una crisis nunca vista, al grado de que ya tenemos que estar comprando petróleo crudo, y con el gas ocurre lo mismo", apuntó.
El presidente electo tomó una hoja de papel y dibujó los planes de incrementar la producción producir gasolinas en una nueva refinería y dejar de exportar crudo.
Anticipó que, al construir una refinería en Dos Bocas en las costas del Golfo de México, el país podrá relanzar la refinación.
"Va a costar muchísimo, pero con esto vamos a tener para producir las gasolinas", señaló.
"Está así la caída del petróleo, así está, tenemos que detener esto, el cálculo es que vamos a caer hasta un millón 500 mil barriles [a mediados de en 2019] entonces, vamos a tratar de hacer esto para 2024, va significar 2 millones 400 mil barriles; ni pensar en los 3 millones, no se podría", dijo el futuro mandatario trazando gráficas con datos.
López Obrador cuestionó los planes del Gobierno saliente, en materia de producción.
Decían que íbamos a estar produciendo 3 millones de barriles diarios (…) es una crisis nunca vista, al grado de que ya tenemos que estar comprando petróleo crudo, y con el gas ocurre lo mismo", apuntó.
El presidente electo tomó una hoja de papel y dibujó los planes de incrementar la producción producir gasolinas en una nueva refinería y dejar de exportar crudo.
Anticipó que, al construir una refinería en Dos Bocas en las costas del Golfo de México, el país podrá relanzar la refinación.
"Va a costar muchísimo, pero con esto vamos a tener para producir las gasolinas", señaló.
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