Guerra total y definitiva: Donald Trump escala la guerra comercial contra China hasta sus últimas consecuencias

Trump acusa a Google, Facebook y Twitter de alta traición; inicia investigación penal al respecto

Guerra total y definitiva: Donald Trump escala la guerra comercial contra China hasta sus últimas consecuencias

Donald trump ya no oculta para nada su animadversión contra China y declara que los EEUU no los necesitan para nada; y no solo eso, también urge a las empresas estadounidenses a abandonar el país asiático y a buscar nuevos mercados o, de plano, regresarse a EEUU. 

Así es, el presidente norteamericano lleva la guerra comercial hasta el extremo y quiere cortar todo lazo comercial y político con China pues está aterrado del poder económico y militar chino e intenta evitar que los desplacen a un segundo, o hasta un tercer, plano en el concierto internacional. 

Pero ya se ha visto que las medidas que toma Donald trump para intentar frenar el desarrollo económico, tecnológico y militar de China no han servido de nada pero sí tienen un efecto muy dañino para los mismos EEUU así como para todas las demás naciones del mundo. Situación que ya ha sido comprobada por Alemania luego que se declarara de forma oficial que el país entra en recesión. Pero luego de Alemania viene toda la unión europea, y con ellos EEUU. 

Así es, no importa todo lo que intente Donald trump, ninguna medida tendrá el efecto deseado y en vez de lograr que china colapse, lograrán todo lo contrario, es decir, que los mismos EEUU colapsen como globo de feria. 

Ya hasta la misma Reserva Federal (la FED), así como las principales empresas estadounidenses, han declarado la guerra abierta y total a Donald Trump, pues temen que las medidas tomadas por éste les perjudiquen de manera grave e irremediable. 

De esta forma tenemos que la FED no hace caso al mandatario estadounidense y se niega a bajar los tipos de interés tal cómo Trump les está exigiendo; medida ésta pedida por Donald Trump con el supuesto objetivo de depreciar al Dólar y así hacerlo más competitivo en el plano internacional, sobre todo después de que China devaluara su moneda para hacer frente a los nuevos aranceles contra productos chinos decretados por Donald Trump. 

Asimismo, empresas como Facebook, Twitter, Amazon, Google, Microsoft, etcétera, han iniciado estrategias encaminadas a debilitar al gobierno de Donald Trump y así evitar que este se reelija. 

De esta manera tenemos que el presidente norteamericano las está acusando de alta traición y de ser aliadas del gobierno chino y enemigas del gobierno estadounidense. 

Facebook y Twitter han comenzado a eliminar las cuentas de los más cercanos colaboradores, así como de los más destacados seguidores del inquilino de la Casa Blanca. De esta manera Donald Trump ha saltado en rabia y las acusa de alta traición. 

Asimismo, el gigante de Silicon Valley, es decir, Google (en realidad youtube), ha comenzado a censurar todos aquellos videos que estén a favor de las políticas comerciales de Donald Trump, así como a todos aquellos que alaben la imagen del mandatario estadounidense así como sus políticas domésticas e internacionales. 

También Google ha rechazado colaborar en materia de inteligencia artificial con el ejército estadounidense. De esta manera la empresa norteamericana ha preferido colaborar con el gobierno chino al abrir un centro de investigación sobre la materia en territorio de China. Este centro de investigación de Google ha sido acusado de colaborar con el ejército chino, motivo por el cual el gobierno de Donald Trump los ha acusado de alta traición y ha abierto una investigación criminal al respecto. 

Como vemos, la cosa se está poniendo caliente, muy caliente, y habrá que ver en que termina toda esta trama, pues estamos a las puertas de un nuevo orden mundial, nuevo orden en el que EEUU jugará un papel secundario. Y así lo han entendido sus empresas, por eso es que prefieren colaborar con china antes que con el mismo gobierno norteamericano. 

Y de ese llamado a abandonar al país asiático para trasladar toda su producción, así como sus centros de investigación, a suelo estadounidense no habrá nada de nada, sino todo lo contrario: Es decir, más empresas estadounidenses emigrarán a china.