El Ejército de la India planea reemplazar sus principales carros de combate T-72 con 1.770 tanques más modernos, informan los medios locales. Hay señales de que el tanque T-14 Armata ruso está entre los candidatos.
La plataforma Armata sobre la que se basa el innovador tanque ruso T-14 podría ser el candidato ideal para el proyecto 'Vehículos de Combate Multipropósito aptos para el Futuro' (FRCV, por sus siglas en inglés), afirma The Economic Times. De acuerdo con el medio, el valor de la compra podría tener un costo aproximado de 4.500 millones de dólares.
Estas negociaciones podrían tener lugar durante la visita del jefe del Estado Mayor del Ejército indio, Bipin Rawat, a Moscú entre el 1 y 6 de octubre. La visita coincide con la cumbre anual bilateral entre los dos países que se celebrará en Nueva Delhi el 5 de octubre.
Se prevé que en el transcurso de la cumbre se firmen contratos en el ámbito de la defensa por un valor de más de 10.000 millones de dólares, señala el medio.
El Ejército de la India comenzó el proceso de adquisición de los FRCV en noviembre de 2017 y, de acuerdo con lo estipulado, los vehículos blindados se fabricarán en el país asiático por una compañía privada en colaboración con el fabricante original.
Este no sería el primer contrato de esta envergadura que se negocia entre Rusia y la India. Así, los dos Estados participan en un proyecto conjunto para el desarrollo de un caza de la quinta generación ruso-indio, conocido como FGFA —del inglés Fifth Generation Fighter Aircraft—.
Se prevé que en el transcurso de la cumbre se firmen contratos en el ámbito de la defensa por un valor de más de 10.000 millones de dólares, señala el medio.
El Ejército de la India comenzó el proceso de adquisición de los FRCV en noviembre de 2017 y, de acuerdo con lo estipulado, los vehículos blindados se fabricarán en el país asiático por una compañía privada en colaboración con el fabricante original.
Este no sería el primer contrato de esta envergadura que se negocia entre Rusia y la India. Así, los dos Estados participan en un proyecto conjunto para el desarrollo de un caza de la quinta generación ruso-indio, conocido como FGFA —del inglés Fifth Generation Fighter Aircraft—.
A pesar de los rumores de que el país asiático abandonó el proyecto, no ha habido declaraciones oficiales por parte de las autoridades indias. Por su parte, el director de cooperación internacional y política regional de la corporación estatal rusa Rostec, Víktor Kládov, dijo que Nueva Delhi podría estar considerando la compra de estos cazas ya finalizados sin participar en su desarrollo.
En tal caso, los tanques T-14 Armata se adecuarían a esta especificación, puesto que son un producto finalizado y listo para entrar en servicio. Al mismo tiempo, Rusia y la India mantienen un alto nivel de cooperación industrial-militar a pesar de todas las dificultades.
Un 70% de las armas en todas las ramas del Ejército indio vienen de la URSS o de Rusia, con múltiples acuerdos bilaterales en marcha. Entre los proyectos conjuntos en la industria aeronáutica se destacan el misil de crucero supersónico BrahMos, la fabricación bajo licencia de los cazas Su-30MKI, los suministros de los helicópteros Ka-226 y la creación de la empresa conjunta para fabricarlos en la India.
Además, la India está a punto de adquirir los novedosos sistemas de defensa aérea rusos S-400 a pesar de la presión ejercida por EEUU en contra de este contrato.
Al tener en cuenta el enfoque de la doctrina militar india sobre un posible conflicto en dos frentes —China y Pakistán-, que condiciona la necesidad de un gran número de cazas modernos para las Fuerzas Aéreas de la India, los novedosos tanques rusos podrían encontrar su lugar en los planes de Nueva Delhi para el rearme de su Ejército y la contención de sus hipotéticos rivales.
En tal caso, los tanques T-14 Armata se adecuarían a esta especificación, puesto que son un producto finalizado y listo para entrar en servicio. Al mismo tiempo, Rusia y la India mantienen un alto nivel de cooperación industrial-militar a pesar de todas las dificultades.
Un 70% de las armas en todas las ramas del Ejército indio vienen de la URSS o de Rusia, con múltiples acuerdos bilaterales en marcha. Entre los proyectos conjuntos en la industria aeronáutica se destacan el misil de crucero supersónico BrahMos, la fabricación bajo licencia de los cazas Su-30MKI, los suministros de los helicópteros Ka-226 y la creación de la empresa conjunta para fabricarlos en la India.
Además, la India está a punto de adquirir los novedosos sistemas de defensa aérea rusos S-400 a pesar de la presión ejercida por EEUU en contra de este contrato.
Al tener en cuenta el enfoque de la doctrina militar india sobre un posible conflicto en dos frentes —China y Pakistán-, que condiciona la necesidad de un gran número de cazas modernos para las Fuerzas Aéreas de la India, los novedosos tanques rusos podrían encontrar su lugar en los planes de Nueva Delhi para el rearme de su Ejército y la contención de sus hipotéticos rivales.
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