Las afirmaciones de Rusia acerca de que es el conflicto israelí-palestino el que crea inestabilidad en la región y no Irán, provoca ira del régimen de Tel Aviv.
En una entrevista concedida recientemente al diario israelí The Jerusalem Post (JP), Anatoli Viktorov, embajador de Rusia en los territorios ocupados, contradijo las declaraciones de Israel, asegurando que las actividades de Irán en la región no causan problemas.
“Estamos confundidos por la reacción demasiado sensible a los temas tratados en la entrevista de nuestros embajadores en Israel. La posición presentada en ella ha sido comunicada repetidamente a colegas israelíes en varios niveles”, denunció el viernes la portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova, según recoge la agencia estatal rusa de noticias TASS.
Tras subrayar que todas las declaraciones del embajador ruso, citadas en la publicación, están en línea con la conocida posición de Rusia en Asia Occidental, Zajárova recordó que la cuestión de Palestina es fundamental para garantizar la paz, pues sin resolverla es imposible asegurar una estabilidad duradera y constante en la región.
El jefe de la Lista Árabe Conjunta en el parlamento del régimen de Tel Aviv, Ayman Odeh, ya ha reconocido que el principal problema de Asia Occidental no es Irán, sino la ocupación de las tierras palestinas por Israel.
Al respecto, la funcionara ratificó la disposición de Rusia a brindar todo el apoyo posible para lograr tal objetivo, como miembro permanente del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU), de los mediadores internacionales para Asia Occidental, el llamado Cuarteto de Madrid, y como un Estado que siempre apoya las relaciones constructivas con todos los países de la región.
Además, prosiguió, Rusia nunca ha ocultado su actitud negativa hacia los ataques aéreos de Israel contra Siria. “Es difícil negar que tales acciones desestabilizan aún más la ya complicada situación regional”, agregó.
Unidades de la defensa antiaérea del Ejército sirio repelieron el viernes un ataque aéreo israelí contra la región de Mesyaf, ubicada en la provincia de Hama (centro-oeste). Por su parte, Damasco ha pedido a las Naciones Unidas que tomen “medidas firmes e inmediatas” contra las agresiones israelíes al suelo sirio y advierte que su continuación tendrá consecuencias.
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