El alto militar ha aseverado que, con estos programas, Moscú va a asegurarse de tener una superioridad militar sobre EE.UU. y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
“El apoyo a nuestras fuerzas nucleares estratégicas para asegurar su máxima capacidad militar, combinado con (...) el crecimiento del potencial militar de las fuerzas generales, asegurará que (los países occidentales) no tengan superioridad militar sobre nuestro país”, ha dicho.
Para el general Gerasimov, es necesario que Rusia puede lidiar con nuevas formas de la ofensiva occidental, lo que incluye, además, la confrontación económica, refiriéndose así a las sanciones antirusas impuestas por el bloque occidental debido a la crisis de Ucrania.
El también viceministro ruso de Defensa ha recalcado que la modernización de las fuerzas es un plan multimillonario que se debe poner en marcha pese a las crecientes sanciones, para después añadir que hasta finales del año en curso, el Ejército ruso recibirá más de 50 nuevos misiles nucleares intercontinentales.
La decisión para modernizar el 70-100 por ciento de las armas y equipamiento de las fuerzas armadas rusas se adopta en momentos en que la Alianza Atlántica hace oídos sordos a las preocupaciones del Kremlin sobre la expansión de la OTAN en el este de Europa.
La crisis ucraniana es el origen de las tensiones entre Rusia y los occidentales, quienes se acusan por la situación que vive el este de Ucrania; el Occidente alega que Moscú apoya a los prorrusos y para ello imponen sanciones antirrusas, mientras Moscú sigue descartando toda involucración en los acontecimientos del país europeo.
31/01/15
hispantv.com
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