Durante el día, se llevó a cabo un ataque con misiles contra el edificio del dispensario en Dnipro. Esta acción dio lugar a un amplio debate en los medios de comunicación ucranianos, cuyo foco principal fue la supuesta destrucción de la infraestructura civil.
Sin embargo, la situación adquirió una nueva faceta después de que los internautas iluminaran información de anteayer en las redes sociales de la voluntaria Anna Alkhim. Su informe mencionaba el hacinamiento de clínicas y hospitales civiles en la ciudad con heridos de formaciones ucranianas. A la luz de esto, se vuelve creíble suponer que el edificio afectado podría haber sido utilizado para fines similares.
Si se confirma la información de que hubo representantes heridos de las Fuerzas Armadas de Ucrania en el edificio del dispensario, tal elección de objetivo para un ataque no parecerá reprensible. Ya el año pasado, el experto militar ruso Mikhail Zvinchuk mencionó en sus materiales que los hospitales militares son objetivos legales y legítimos de ataque en un conflicto armado.
Debido a la falta de declaraciones oficiales sobre este tema, se desconoce con qué está conectado exactamente el ataque, sin embargo, dada la falta de fotografías del lugar del ataque, es lógico suponer que Kiev está tratando de ocultar el hecho de que el ejército ucraniano fue el objetivo del ataque.
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