"Se acordó que en la primera etapa de integración de los sistemas de pago de los dos países, los ciudadanos iraníes que tengan una tarjeta Shetab (sistema de pago nacional de Irán) y los rusos que posean tarjetas de Mir Business Bank puedan usar cajeros automáticos de ambos países", comentaba Seyyed Abu-Taleb Najafi. Con esto, Rusia sería el primer país en llegar a este nivel de integración bancaria en Irán, dado que ningún otro de la Unión Europea ha conseguido que las tarjetas bancarias de sus entidades nacionales sean válidas en el país árabe, publica el Financial Tribune.
En marzo, el presidente Hassan Rouhani se reunió con su homólogo ruso, Vladimir Putin, en Moscú. Los funcionarios bancarios iraníes, incluido el gobernador del Banco Central de Irán, Valiollah Seif, lo acompañaron y mantuvieron conversaciones con altos funcionarios de la banca rusa.
Najafi enfatizó que al establecer estas infraestructuras, el país estará listo para el momento en que BCI llegue a un acuerdo con las redes de pago internacionales y los bancos de otros países para la integración de los sistemas de pago. Finalmente, fue durante el pasado mes de agosto, cuando se firmó un memorando de entendimiento entre ambos países para el desarrollo de lazos bancarios mutuos.
El CEO de ISC ha señalado que la próxima fase del plan será integrar el sistema de pagos de Irán con las redes internacionales, lo que requiere una infraestructura sólida a la altura de los estándares internacionales. "Estamos preparando los requisitos de infraestructura necesarios para implementar la próxima fase del plan mediante el establecimiento de una red en cooperación con una empresa rusa llamada BPC", agregó.
A principios del mes de octubre, ISC firmó un acuerdo con BPC de Rusia para desarrollar una plataforma nacional en el que se vinculan los sistemas internacionales de pago con tarjeta con los de Irán.
La integración de las tarjetas bancarias iraníes con las de los países extranjeros estaba en la agenda de la BCI desde que se firmó el acuerdo nuclear, denominado ‘Plan de Acción Integral Conjunto’, implementado el 16 de enero de 2016.
Najafi explicó que el proceso de establecer las infraestructuras para la integración con los sistemas de pago internacionales tomaría al menos 10-12 meses. "Tenemos que esperar y ver cómo concluyen las negociaciones entre BCI y compañías de pagos extranjeras como la UPA de China y la japonesa JCB", dijo.
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