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lunes, 14 de octubre de 2019

Kurdos sirios podrían recurrir a Rusia para detener agresión turca



El comandante de las llamadas FDS, abandonadas por EE.UU. ante la agresión turca, podría exigir a Rusia cerrar el espacio aéreo de Siria a la Aviación turca.

Durante una reunión mantenida el pasado jueves, el comandante de las llamadas Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), Mazloum Kobani, le dijo al enviado especial adjunto de la llamada “coalición” que lidera Estados Unidos contra el grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe), William Roebuck, que Washington estaba permitiendo que los kurdos fueran “masacrados” en la ofensiva que ha puesto en marcha Turquía en su contra en el norte de Siria.

Con estas palabras, el comandante de la milicia kurdo-árabe buscó saber si su antiguo aliado haría algo o no para proteger a los kurdos. Tal conversación fue desvelada el sábado por la cadena estadounidenses CNN, que citó un documento que obtuvo en exclusiva del seno del Gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump.

“No están dispuestos a proteger a la gente, pero no quieren que venga otra fuerza para protegernos. Nos han vendido. Esto es inmoral”, lamentó Kobani en el encuentro.

La ofensiva turca comenzó días después de que EE.UU. diera un giro de 180 grados a su alianza con las FDS, de las que las Unidades de Protección Popular (YPG, por sus siglas en kurdo) forman parte, consideradas terroristas por Ankara por su vínculo con el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK, por sus siglas en kurdo).

Ante el operativo, el líder kurdo le exigió a EE.UU. que les ayudara a detener los ataques de Turquía, para luego amenazar con recurrir a los Gobiernos de Rusia y Siria para que detengan la agresión de Ankara.

No están dispuestos a proteger a la gente, pero no quieren que venga otra fuerza para protegernos. Nos han vendido. Esto es inmoral”, lamenta el comandante de las llamadas Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), Mazloum Kobani, sobre EE.UU., que dejó solas a las fuerzas kurdas en Siria ante la agresión turca.

La alianza traería aviones de combate rusos para imponer una zona de exclusión aérea sobre el noreste de Siria, lo que dificultaría la capacidad de Turquía para realizar ataques aéreos.

“Necesito saber si son capaces de proteger a mi gente, de evitar que estas bombas caigan sobre nosotros o no. Necesito saberlo, porque, si no lo hacen, tengo que hacer un trato con Rusia y el régimen (sirio) ahora e invitar a sus aviones a proteger esta región”, avanzó.

Pese a que EE.UU. ha dejado en claro que no apoyará la intervención de Turquía en el norte de Siria, y tampoco se implicará en esa operación ni mantendrá sus fuerzas en el área, su decisión de retirar sus tropas de la zona, de hecho, se puede interpretar como que le ha dado luz verde a Turquía para atacar a los kurdos.

Las FDS han tachado de “puñalada por la espalda” la retirada de los soldados norteamericanos, no obstante, esta no es la primera vez que Washington deja de lado a sus aliados en Siria.

El Gobierno de Damasco ha condenado, por su parte, la agresión turca, tachándola de constituir una “flagrante” violación de su soberanía, y ha prometido responder por medios legítimos; asimismo, ha alertado de que podría desencadenar una nueva crisis en su territorio.

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