Por medio de un informe emitido el lunes por dos asesores de FMI, la organización puso de relieve que adoptar criptodivisas, nuevas formas digitales de dinero, que están ganando terreno en el mercado financiero mundial, es una mala idea, ya que sus riesgos, costos e inconvenientes superan los beneficios que tiene.
Aunque los criptomonedas, incluido el bitcóin, como moneda nacional tienen el potencial de mejorar la inclusión financiera entre los proveedores de pagos, y son realmente seguros, de fácil acceso y económicos para realizar transacciones, pero en la mayoría de los casos conllevan riesgos sustanciales para la estabilidad macrofinanciera, la integridad financiera, la protección del consumidor y el medio ambiente, según la nota.
El texto, también, advierte a los países que pueden verse tentados por elegir las criptomonedas como su moneda nacional que “hacerlo no es sencillo”. “Requiere una inversión significativa, así como decisiones políticas difíciles, como aclarar el papel de los sectores público y privado en la provisión y regulación de formas digitales de dinero”, recalca el informe.
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