“Les estamos pidiendo, estamos exigiendo, que nos dejen en paz y nosotros les dejaremos en paz, para que podamos luchar contra el enemigo común, que es Daesh”, afirmó el viernes el subsecretario de Estado interino de Estados Unidos, Joey Hood, en una entrevista con la televisión saudí Al Arabiya, dirigiéndose a los grupos de la Resistencia iraquíes.
El alto funcionario del Departamento de Estado señaló que se entiende que algunos de estos grupos iraquíes están completamente en desacuerdo con lo que Estados Unidos está tratando de hacer en Irak.
Hood afirmó que Estados Unidos no está directamente involucrado en una “guerra abierta” con los grupos de Resistencia, y puso de relieve que los ataques recurrentes contra las bases y las fuerzas estadounidenses “no sirven a los intereses de nadie”.
En los últimos días se han registrado múltiples ataques con cohetes y drones contra posiciones estadounidenses en Irak, después de que Washington perpetrara el 28 de junio un bombardeo contra posiciones de movimientos de la Resistencia iraquíes en la zona fronteriza iraquí-siria, dejando varios muertos tanto entre las fuerzas populares como civiles.
En el último ataque, varios cohetes impactaron el jueves en la Zona Verde de Bagdad que alberga la embajada de EE.UU. provocando la activación de las sirenas antiaéreas cerca de la instalación diplomática estadounidense.
Tanto los grupos de la Resistencia como las autoridades iraquíes denuncian que la presencia de EE.UU. en su territorio ha aumentado la inseguridad en la zona y subrayan que, si las fuerzas estadounidenses no salen del país árabe hasta la fecha prevista, los tratarán como “tropas de ocupación” y podrían enfrentar la opción militar.
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